La mujer, Leslie Mostel-Paul, informó que Travis, el chimpancé, le mordió una mano e intentó introducirla en un vehículo cuando ella lo saludó. La mujer dijo que denunció el hecho ante la dueña del chimpancé y a la policía.
Travis fue muerto a balazos el lunes luego de herir de gravedad a Charla Nash, de 55 años, amiga de Sandra Herold, dueña de Travis. Herold acuchilló a Travis tratando de frenar la feroz agresión. Posteriormente, un policía lo acribilló a balazos.
Nash continuaba el jueves en el hospital, con graves heridas en su rostro y en sus manos.
"Creo que si hubieran hecho un seguimiento, tal vez las leyes habrían cambiado más rápido y esa otra mujer no habría estado en el hospital, luchando por su vida", dijo Mostel-Paul, una ex residente de Stamford que ahora vive en Atlanta.
Herold, que crió a Travis desde que era un infante, dijo que se trataba de una mascota muy cariñosa cuya conducta, el lunes, había sido totalmente insólita.
La dueña de Travis dijo que al parecer el chimpancé quiso proteger a Herold cuando vio aparecer a Nash, y por eso la atacó. Aunque Travis conocía muy bien a Nash, la mujer, en esa ocasión, estaba manejando un vehículo diferente, lucía un nuevo tipo de peinado, y sostenía en su mano un muñeco de peluche frente a su rostro. El muñeco era un regalo para Travis.