CIUDAD DE MÉXICO, 11 mayo 2010 (El Universal).- Hoy en día la infidelidad está saliendo del clóset y de los culebrones televisivos para instalarse en la vida real, según investigaciones realizadas por especialistas del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) y de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En el caso de las mujeres, esta investigación revela seis argumentos sobre la infidelidad: problema de comunicación con la pareja, insatisfacción sexual, falta de amor, características personales de otros hombres, dinero y, finalmente, "el desquite ante una infidelidad previa de la pareja".
Los hombres, además de las características físicas de otras mujeres, señalaron otras seis causas: problemas de comunicación, insatisfacción sexual, falta de amor, falta de higiene personal de su pareja, problemas económicos y, por último, "el desquite".
Según sus descubrimientos, en México, los porcentajes de la infidelidad femenina se han disparado sobremanera, y se piensa que el 15 por ciento de las esposas y 25 por ciento de los esposos tienen o han tenido relaciones extramaritales alguna vez en su vida.
Cuando hay infidelidades meramente emocionales, en donde se involucran aventuras en las que el sexo no está en el medio, las cifras aumentan: 35 por ciento de las mujeres y 45 por ciento en los hombres.
De acuerdo con otros estudios llevados a cabo por la Facultad de Psicología de la UNAM, las causas principales de la infidelidad en México son frustración, inconformidad y otros problemas de acuerdo con la historia de cada pareja, pero estas dos son las primeras en encabezar la lista.
Los resultados del IIPCS apuntan a que los lugares más propicios para la infidelidad son los centros de trabajos, clubes, bares o gimnasios.
Las razones para que ambos engañen son distintas, dice la investigación: ellos lo son para refrendar su hombría, buscar el placer de la relación sexual y para buscar reproducirse cuantas veces sea mejor. Ella en cambio busca el cariño o comprensión que ya no encuentra en la relación sexual. Él busca placer; ella, afecto.
Sin embargo, las cifras no cuadran. "Por un lado el único interés por contraer matrimonio es el amor, así lo confirman las estadísticas: 76 por ciento de parejas casadas lo hacen por amor, seguido por el hecho de tener hijos con 24 por ciento y por tener sexo el restante 16 por ciento. Esto debería consolidar las relaciones de pareja; sin embargo, vemos que está sucediendo todo lo contrario, la gente se divorcia mucho más ahora que en el pasado; por ejemplo la tasa de divorcio en México se ha incrementado 80 por ciento con relación a los años cincuenta", señala Carlos Caudillo Herrera, presidente del IIPCS.
Cabe señalar que el IIPCS cuenta con especialistas en la materia, por lo que las parejas que han padecido o padecen del problema de la infidelidad pueden acudir a la clínica del organismo, la cual está destinada para personas de todos los niveles socioeconómicos.