BUENOS AIRES, 2 noviembre 2017 (National Geographic).- Un informe que dio a conocer esta semana la National Geographic viene a demoler la tranquilidad de aquellos que encuentran en el baño su gran momento de paz, ya sea para reflexionar, leer o simplemente escuchar música en uno de los ambientes más preciados de la casa. Es decir, un antes y un después.
A través de un video, que se grabó en 2013, expertos demuestran lo fácil que es para una rata ascender desde las alcantarillas hasta un inodoro, recorriendo las cañerías y sorteando todos los inconvenientes que se puedan presentar en su cruzada por la búsqueda de alimento o de nuevos espacios secos para habitar.
Según explican en el video, las ratas tienen una gran resistencia e increíble flexibilidad para desplazarse por las tuberías más angostas.
El informe demuestra como las ratas pueden nadar durante tres días y son capaces de aguantar la respiración bajo el agua hasta tres minutos. Esto explica que están preparadas para soportar y atravesar -ilesas- las descargas de agua e incluso nadar dentro de las cloacas.
Según demostraron los expertos que se encargaron de estudiar estos comportamientos, las ratas son capaces de reducir su caja torácica para lograr atravesar agujeros de un diámetro inferior al de su cuerpo. Al punto de poder filtrarse por espacios del tamaño de una moneda. Esto es posible gracias a sus costillas articuladas en la columna vertebral que les permiten comprimirse en espacios muy estrechos y pasar a través de la más pequeña grietas.
¿Cómo suben hasta el inodoro de un departamento?, por ejemplo. El trabajo que se dio a conocer en las últimas horas demuestra que sus afiladas garras les permiten a las ratas escalar casi cualquier superficie vertical, haciendo sencillo lo imposible en el caso de las tuberías internas de un edificio.
Ahora ya lo sabés, no vale sorprenderse la próxima vez si al levantar la tapa del inodoro ves una visita de este tipo. Para las ratas es más fácil de lo que parece llegar hasta allí.
