lunes, 20 de octubre de 2008

Prometen concierto desde la Estación Espacial


MOSCÚ, 19 octubre 2008 (EFE).- La tripulación de la Estación Espacial Internacional (EEI) prometió hoy durante una videoconferencia con el Centro de Control de Vuelos Espaciales de Rusia ofrecer un concierto en la próxima conexión con la Tierra.

"Ayer me enteré de que Gregory (el astronauta de la NASA Greg Chamitoff) toca la guitarra y que hay una en la estación. En la próxima conexión os cantaremos sin falta", dijo el cosmonauta ruso Yuri Lonchakov, citado por la agencia Interfax.
Explicó que le gusta mucho cantar y recordó que ya adelantó hace unas semanas, antes de viajar al espacio, que tenía intención de tocar la guitarra y aprender a tocar la armónica para amenizar los escasos ratos de ocio que iban a tener él y sus colegas en la plataforma orbital.

Por su parte, el cosmonauta ruso Oleg Kononeko, integrante de la misión número 17 de la EEI, que el próximo día 24 regresará a la Tierra tras medio año en el espacio, lamentó no haber podido realizar su sueño de pintar en el cosmos un cuadro con tizas.

"No conseguí dibujar, pero sí trabajar bien", dijo.

Quien sí logró dibujar en el transcurso de un experimento fue Richard Garriott, el sexto turista espacial e hijo del ex astronauta de la NASA Owen Garriott.

El turista espacial, director adjunto de la agencia de turismo espacial Space Adventures, declaró que todavía no ha decidido si completará su colección de curiosidades cósmicas con la cápsula de descenso con la que aterrizará en su regreso a la Tierra junto a la expedición número 17 el próximo día 24.

"Estoy enamorado de la nave Soyuz, pero (adquirir el módulo de descenso) es una cuestión que me plantearé más adelante", dijo.

Agregó que guarda una muy buena impresión de su vuelo a bordo de la nave y subrayó que "la tecnología espacial rusa tiene un gran futuro" y "todo por delante".

Recientemente, Garriott afirmó que le gustaría tener una parcela de su propiedad en la Luna y recordó que entre los objetos de su colección figuran un vehículo lunar soviético que todavía se encuentra en ese satélite natural de la Tierra, así como dos copias del primer Sputnik lanzado por la Unión Soviética en 1957.

El cosmonauta Serguéi Volkov, que dentro de una semana concluirá su misión en la plataforma orbital, confesó hoy tener sentimientos contradictorios ante su inminente regreso a la Tierra.

Por un lado, señaló que tras medio año en el espacio tiene ganas de ver a su familia y a sus amigos pero, por otro, desea permanecer en la EEI o, en todo caso, volver de nuevo en un futuro.

Mientras, Lonchakov quiso agradecer a la tripulación saliente el buen estado en el que deja la EEI antes de su regreso a la Tierra.
"Quiero dar las gracias a los colegas que han trabajado hasta nuestra llegada en la estación. Está en muy buen estado, todo está colocado con gran precisión en el lugar que le corresponde. Estamos muy contentos de trabajar aquí", dijo.
Como detalle logístico, señaló que al coincidir las tripulaciones saliente y entrante durante unos días en la EEI, no hay espacio suficiente para todos en la plataforma orbital cuando llega la hora de dormir.

Por eso, precisó, Garriott se acuesta en el módulo europeo "Columbus", el astronauta estadounidense Michael Fincke en el japonés "Kibo", mientras que él mismo lo hace en la esclusa "Kvest".

Mientras, Volkov y Kononenko duermen en el módulo de servicio ruso y Chamitoff lo hace en el segmento estadounidense de la EEI.