MOSCÚ, 23 septiembre 2010 (BBC).- En el Campeonato Mundial de Karaoke realizado en Moscú, Rusia, una pareja de Finlandia fue coronada por los jueces como mejores intérpretes en las ramas masculina y femenina, pero un cantante estadounidense recibió el voto popular y un premio bastante inusual -un millón de masitas de harina rellenas.
Cantantes aficionados de 16 países tomaron parte de la competencia que duró tres días en un salón cerca del Kremlin.
Se trata del octavo encuentro internacional de esta expresión artística que surgió de los pasatiempos en bares y tabernas para convertirse en un fenómeno mundial.
"Buenas para la voz"
Después de una ardua velada de canto, los finlandeses Sam Moudden y Saarima Ylitao fueron galardonados por los jueces como campeones del género y recibieron dinero, contratos de grabación y máquinas de karaoke.Moudden, vestido al estilo de un Frank Sinatra joven, interpretó "Je Suis Malade", mientras que su compatriota Ylitao, en un vestido largo púrpura, cantó el clásico de Celine Dion, "I Surrender".
Sin embargo, fue Edward Pimentel -un técnico de teléfonos de Albuquerque, Nuevo México, Estados Unidos- quien recibió el voto de popularidad del público con su estilo de Rhythm and Blues, escogiendo la canción "DJ's Got Us Fallin' in Love" de Usher, como tema final.
Su premio fue un millón de empanaditas -o masitas de harina rellenas- un típico plato ruso cuyo consumo, supuestamente, es bueno para la voz.
Los organizadores aseguran que tendrá suficientes empanaditas para durar 27 años si come 100 de estas al día.
No obstante, el corresponsal de la BBC en Moscú, Steve Rosenberg, dice que Pimentel no tendrá cargar a cuestas con su premio ya que le fue entregado en la forma de un certificado que le garantiza empanaditas gratis cuando se le antojen.
Video: World Karaoke Championship in Moscow (ITN News)
Foto: Edward Pimentel, oroginario de Albuquerque, New Mexico, cantando There Goes My Baby en el Mundial de Karaoke. (Mikhail Metzel/Associated Press)
