LONDRES, 29 febrero 2012 (El Universal).- Caroline Kinsey es una mujer inglesa que nació con los genitales de ambos sexos, sin embargo vivió como hombre durante 40 años, porque sus padres no le dijeron de su condición.
De acuerdo con el Daily Mail, los padres de Kinsey le ocultaron su condición intersexual médica hasta que tenía 19 años. Siendo infante se le sometió a una cirugía eligiendo que fuera varón y fue criado como Carl John Baker.
Después de muchas burlas en la escuela y el supuesto de que su cuerpo no era el de un varón, sus padres decidieron revelarle la verdad sobre su condición.
Carl John Baker estuvo casado con una mujer por un breve tiempo, pero después de un periodo de depresión y sufrimiento, hace dos años decidió vestirse como mujer y ahora vive completamente como Caroline Kinsey.
Pese al secreto que le guardaron sus padres, piensa que ellos no sabían lo que hacían y no los culpa, pues se dejaron llevar por un los consejos del médico.
Y confiesa que ella desde joven supo que era diferente, pero no entendía el por qué, revelando además que un doctor le dijo a su madre que sería más fácil ‘ocultar’ sus genitales femeninos, por lo que decidieron criarlo como varón.
El mismo médico les recomendó a sus padres guardarle el secreto tanto a Caroline, como a todas las demás personas todo el tiempo que fuera posible.
Caroline nació en el Bull Hill Hospital de Darwen, Lancashire, Inglaterra en 1968, pero la buena noticia de su nacimiento para su padres Monica y Baker Rudolph, se desvaneció cuando les informaron que su hija también tenía genitales masculinos.
Ahora Caroline admite que es mucho más feliz viviendo como una mujer después de haber pensado en su suicido cuando era hombre.
Caroline dice que ha habido un montón de malentendidos acerca de su estado. Y ahora se dedica a hacer un llamado para crear conciencia sobre los hermafroditas, la cual ha sido respaldada por la Asociación de Intersexuales del Reino Unido. Sin embargo, ella todavía se enfrenta el dolor de la discriminación en su vida diaria.
"Incluso ahora, dos años después, no todo el mundo me acepta hago un montón de trabajo voluntario y cuando visito el Ejército de Salvación, muchos de sus miembros me aceptan, mientras que otros sólo quieren ser desagradable todo el tiempo”, dice.
Y agrega: "Ahora estoy buscando a tener una cirugía para extirpar los genitales masculinos para siempre. Esperando que esto me permitirá dejar el pasado detrás de mí y me ayude a seguir adelante y encontrar el amor”.
Foto: Caroline Kinsey (Daily Mail)
Después de muchas burlas en la escuela y el supuesto de que su cuerpo no era el de un varón, sus padres decidieron revelarle la verdad sobre su condición.
Carl John Baker estuvo casado con una mujer por un breve tiempo, pero después de un periodo de depresión y sufrimiento, hace dos años decidió vestirse como mujer y ahora vive completamente como Caroline Kinsey.
Pese al secreto que le guardaron sus padres, piensa que ellos no sabían lo que hacían y no los culpa, pues se dejaron llevar por un los consejos del médico.
Y confiesa que ella desde joven supo que era diferente, pero no entendía el por qué, revelando además que un doctor le dijo a su madre que sería más fácil ‘ocultar’ sus genitales femeninos, por lo que decidieron criarlo como varón.
El mismo médico les recomendó a sus padres guardarle el secreto tanto a Caroline, como a todas las demás personas todo el tiempo que fuera posible.
Caroline nació en el Bull Hill Hospital de Darwen, Lancashire, Inglaterra en 1968, pero la buena noticia de su nacimiento para su padres Monica y Baker Rudolph, se desvaneció cuando les informaron que su hija también tenía genitales masculinos.
Ahora Caroline admite que es mucho más feliz viviendo como una mujer después de haber pensado en su suicido cuando era hombre.
Caroline dice que ha habido un montón de malentendidos acerca de su estado. Y ahora se dedica a hacer un llamado para crear conciencia sobre los hermafroditas, la cual ha sido respaldada por la Asociación de Intersexuales del Reino Unido. Sin embargo, ella todavía se enfrenta el dolor de la discriminación en su vida diaria.
"Incluso ahora, dos años después, no todo el mundo me acepta hago un montón de trabajo voluntario y cuando visito el Ejército de Salvación, muchos de sus miembros me aceptan, mientras que otros sólo quieren ser desagradable todo el tiempo”, dice.
Y agrega: "Ahora estoy buscando a tener una cirugía para extirpar los genitales masculinos para siempre. Esperando que esto me permitirá dejar el pasado detrás de mí y me ayude a seguir adelante y encontrar el amor”.
Foto: Caroline Kinsey (Daily Mail)