NUEVA YORK, 11 diciembre 2012 (ABC).- Como un guiño a la esperanza en plena crisis Pantone lo ha elegido por estar asociado al crecimiento, la renovación y la prosperidad
«El color de la elegancia y la belleza que aumenta nuestra sensación de bienestar, el equilibrio y la armonía», dice Pantone en su página web oficial para anunciar el color del 2013, el verde esmeralda.
Este verde radiante y lleno de vida toma el relevo del Tangerine Tango (naranja rojizo con fuerza), que fue el color de 2012. Como si de un soplo de esperanza se tratase, Pantone elige el verde para el 2013. Un año marcado, de nuevo, por la crisis económica que se vestirá con un color asociado al crecimiento, la renovación y prosperidad. «Durante siglos, muchos países han optado verde para representar la curación y la unidad», dicen desde Pantone.
Este tipo de verde no es ajeno, desde hace varias temporadas es un habitual de las pasarelas y las alfombras rojas. Incluso el inolvidable vestido de Keira Knightley en 2007 en la película «Expiación» (diseñado por Jacqueline Durran) era de este color, aunque el de aquel año era el «Chilli Pepper», una especie de color vino. Gucci y Roberto Verino son algunos de los que ya mostraron en sus colecciones primavera-verano 2013 el verde esmeralda como una de sus opciones favoritas. Stella McCartney eligió este color para el lápiz de ojos de sus modelos, Kenzo para las uñas y Dior para la sombra de ojos con cristales. En cuanto a estrellas, Angelina Jolie, Sofía Vergara, Mila Kunis, Taylor Swift, Zoe Saldana y Kate Hudson son algunas de las que se han rendido a este color.
Para llegar a la elección del color de año Pantone asegura que «peina» el mundo en busca de las influencias de color. Desde la industria del entretenimiento, películas en plena producción, colecciones de arte, destinos de viaje, condiciones socio-económicas... Cualquier cosa puede ser objeto de inspiración para esta difícil decisión. Y luego, el color del año de Pantone influye en empresas y diseñadores a la hora de crear sus productos. El círculo vicioso de las tendencias.