miércoles, 18 de marzo de 2009

Una empresa rusa saca al mercado un vodka solo para mujeres


La publicidad dice que Damskaia es el complemento ideal de una ensalada tras el deporte


MOSCÚ, 18 marzo 2009 (IZVESTIA).- Regalarle a una mujer una botella de vodka es una ofensa en Rusia. Peor que preguntarle cuántos años tiene. A no ser que sea la compañera de juerga de toda la vida. Beber vodka hasta hace poco ha sido una costumbre puramente masculina.

Las dos importantes excepciones de este arraigado tabú han sido las mujeres alcoholizadas (que consumen vodka por ser un aguardiente barato), así como las llamadas chicas de metal, las empresarias de éxito que han asimilado los hábitos de sus colegas masculinos.

Pero los tiempos cambian. "Entre nosotras, chicas", es el eslogan de la nueva marca de vodka, Damskaia (Para las damas), diseñada especialmente para animar a la parte femenina de la sociedad rusa a que saboree con placer la bebida alcohólica más popular desde hace varios siglos. La verdadera percepción del vodka por los rusos se explica con el hecho de que su nombre tiene su raíz en la palabra vodá (agua). Los rusos comenzaron a llamar su aguardiente "el vodka" a principios del siglo pasado. El nombre original en su versión rusa era el "vino de pan" o el "vino de mesa blanco".

Proyecto revolucionario

La compañía Deiros lanzó en diciembre la producción del vodka Damskaia, un proyecto revolucionario tanto por su forma como por su contenido. El fabricante insiste que las rusas necesitan disponer de su propia bebida fuerte. En Moscú ya hay taxis rosas y cigarrillos mentolados solo para mujeres. Lo que faltaba era el agua ardiente.

La agresiva campaña publicitaria, que asciende a ocho millones de euros, ha llenado las páginas de las revistas femeninas y las estaciones de metro de Moscú y San Petersburgo. Una botella elegante, con etiqueta plateada y de tonos violetas, que se parece a un frasco de perfume, aparece decorada con una minifalda blanca al estilo de Marilyn Monroe. El diseño elaborado por el estudio londinense de la multinacional Futurebrand costó a los rusos 200.000 euros y es, de momento, la apuesta clave de la compañía productora para atraer a su clientela.


Hay cinco variedades. Además del vodka puro y duro se puede comprar una botella con sabor a vainilla, almendra o lima. También hay una variedad para cócteles. El vodka femenino se produce en una destilería situada en San Petersburgo. Los creadores de Damskaia afirman que es un producto sano. Prometen que es ideal hasta para acompañar una ensalada tras una sesión en el gimnasio.

El precio de una botella, que no supera a los 300 rublos (8 euros), pone Damskaia por encima de los vodkas más accesibles. En comparación con los de las marcas selectas, cuyo precio asciende a 1.000 rublos (27 euros) por un litro,es un producto relativamente barato. Según Deiros, sus principales consumidoras serán sobre todo mujeres casadas, bien educadas y adineradas.
"Es un producto nuevo y lo pedimos poco. La mayor parte de los compradores son hombres que compran botellas bonitas para regalarlas, como si fueran frascos de perfume", explica un responsable del supermercado Novoarbatski, ubicado en el centro de Moscú.

Crecimiento del 15%

A pesar de que en Rusia el crecimiento anual del mercado del vodka ronda el 15%, los anteriores intentos de implantar el vodka femenino fracasaron. "El nuevo vodka no va interesar a ninguna de las dos consumidoras tradicionales del agua ardiente.

Para las alcohólicas degradadas es demasiado caro y las mujeres empresarias son muy conservadoras y prefieren vodka más caro de marcas selectas. Las demás mujeres en grandes ciudades tradicionalmente beben vinos, licores o cócteles", opina un experto del centro ruso Tsiffra para los estudios de los mercados nacional y regional de bebidas alcohólicas.
La agresiva campaña publicitaria del nuevo vodka preocupa al sector médico, que piensa que la propuesta de tomar un vodka tras cada sesión en el gimnasio amenaza con causar nuevos casos de alcoholismo femenino.

Según Yuri Sorokin, psicólogo de un centro de rehabilitación para alcohólicos, el 60% de los pacientes con problemas con la bebida son mujeres, incluidas esposas de millonarios. Según los datos oficiales, hay 2,5 millones de alcohólicos rusos. Pero los expertos del Instituto Serbski de Psiquiatría Social y Forense de Moscú creen que la cifra real supera siete veces la oficial.