La 38 edición de la competición en el edificio más famoso de Nueva York, que se disputó esta noche, tuvo como vencedor, en la categoría masculina, al alemán Christian Riedel, de 34 años, que hizo un tiempo de 10 minutos y 16 segundos.
La meta estaba situada en el observatorio del edificio, en el piso 86, a una altura de 326 metros sobre el nivel de la calle.
Ninguno de los dos pudieron superar los récords que tiene esta prueba, que conservan Paul Crake (2003) y Andrea Mayr (2006), con unos tiempos respectivos de 9 minutos 33 segundos y 11 minutos 23 segundos.
El tiempo que consiguió la australiana, de 41 años, estuvo incluso por debajo de lo logrado el año pasado, su quinta victoria, cuando subió el Empire State en 11 minutos y 57 segundos.
El único iberoamericano que llegó a la meta entre los treinta primeros clasificados fue el español David Robles Tapia, de 40 años, un bombero residente en la ciudad de Zaragoza, que ocupó el octavo lugar, con un tiempo de 11 minutos 48 segundos.
En la categoría masculina, el segundo clasificado fue el noruego Thorbjorn Ludvigsen, de 26 años, que el año pasado se coronó triunfador de la prueba, con 10 minutos 6 segundos, trece segundos menos del tiempo que consiguió hoy.
En la competición participaron centenares de corredores verticales de todo el mundo. Discurre por una escalera estrecha y sin ventanas por la que sólo caben dos personas al mismo tiempo, lo que representa retos adicionales para una prueba de este tipo.
La carrera está organizada por la agrupación deportiva New York Road Runners (NYRR). El edificio, uno de los lugares favoritos de los turistas que llegan a esta ciudad, quedó cerrado para que pudiera disputarse la prueba.
La meta estaba situada en el observatorio del edificio, en el piso 86, a una altura de 326 metros sobre el nivel de la calle.
Ninguno de los dos pudieron superar los récords que tiene esta prueba, que conservan Paul Crake (2003) y Andrea Mayr (2006), con unos tiempos respectivos de 9 minutos 33 segundos y 11 minutos 23 segundos.
El tiempo que consiguió la australiana, de 41 años, estuvo incluso por debajo de lo logrado el año pasado, su quinta victoria, cuando subió el Empire State en 11 minutos y 57 segundos.
El único iberoamericano que llegó a la meta entre los treinta primeros clasificados fue el español David Robles Tapia, de 40 años, un bombero residente en la ciudad de Zaragoza, que ocupó el octavo lugar, con un tiempo de 11 minutos 48 segundos.
En la categoría masculina, el segundo clasificado fue el noruego Thorbjorn Ludvigsen, de 26 años, que el año pasado se coronó triunfador de la prueba, con 10 minutos 6 segundos, trece segundos menos del tiempo que consiguió hoy.
En la competición participaron centenares de corredores verticales de todo el mundo. Discurre por una escalera estrecha y sin ventanas por la que sólo caben dos personas al mismo tiempo, lo que representa retos adicionales para una prueba de este tipo.
La carrera está organizada por la agrupación deportiva New York Road Runners (NYRR). El edificio, uno de los lugares favoritos de los turistas que llegan a esta ciudad, quedó cerrado para que pudiera disputarse la prueba.
Fotos: Agencias