LONDRES, 13 agosto 2008 (BBC).- Barry fue criado por seres humanos durante 10 años. Un solitario buitre que aparentemente se creía humano por fin encontró el verdadero amor, afirmaron sus cuidadores.
Desde su nacimiento hace 10 años Barry, un buitre negro americano, siempre había estado con seres humanos y no se mostraba dispuesto a asociarse con otras aves de su propia especie.
Los trabajadores del Kirkleatham Owl Centre, ubicado en el norte de Inglaterra, en el Reino Unido, comenzaron a preocuparse cuando Barry empezó a perseguir a los visitantes con la esperanza de aparearse.
Sin embargo, ahora están de plácemes porque finalmente se le consiguió pareja: una hembra traída desde Europa del Este.
"Contrario a lo que la gente cree, los buitres son criaturas sensibles y Barry es especialmente nervioso. Fue criado por seres humanos y se asociaba más con la gente que con las aves", agregó. Los últimos dos años han sido una pesadilla. Quedaba casi exhausto siguiendo a todo el mundo porque estaba desesperado por aparearse".
Craig Wesson
La llamada del amor
Todo cambió con la llegada de la hembra.
"Ahora toman sol juntos y a veces la hembra le arranca las plumas de la cola, lo cual hace que comience una persecución en la pajarera. Esta historia tiene un final feliz, pero podría ser incluso mejor si tienen pichones"
C. Wesson
La hembra sigue siendo demasiado joven para aparearse, pero podría estar lista en un par de años.
Es frecuente ver buitres negros americanos silvestres en Norte y Sudamérica, pero estas aves raramente se reproducen en cautividad.
Foto: Barry el Buitre (Agencias)