Arabia Saudí cierra los gimnasios femeninos sin licencia

YEDA, 30 abril 2009 (Reuters) - "¡Déjala engordar!" es el eslogan que usan las mujeres en Arabia Saudí para enfrentarse al cierre de los gimnasios femeninos.
Cansado del aumento de gimnasios sin licencia para mujeres, el ministerio de Asuntos Municipales y Rurales cerró dos en la ciudad de Yeda y uno en la ciudad de Dammam en el Golfo Pérsico por no tener licencia.

Como respuesta, los columnistas de los periódicos y los blogueros están utilizando la sarcástica frase "¡déjala engordar!" para devolver el golpe, aunque es casi una batalla perdida.

En Arabia Saudí, donde el clero tiene mucha influencia en la sociedad, los gimnasios se dividen por sexos a causa de los valores tribales y religiosos.

La participación femenina en deporte ha sido durante mucho tiempo un asunto problemático en el reino, habiéndose prohibido la educación física en los colegios públicos de chicas. El clero alega razones religiosas para prohibir la participación de las mujeres en los deportes.

Mientras que muchos gimnasios masculinos obtienen licencias del organismo deportivo gubernamental, los femeninos no tienen ninguna autoridad oficial de seguimiento.

"La idea del deporte femenino no existe para nuestro gobierno", dijo Fouziah Alouni, una defensora de los derechos humanos.

"Privar a las mujeres de esto es una forma más de marginarlas. Dadnos una razón justificable o dejad a las mujeres en paz. Esto es insoportable", añadió.
El resultado ha sido altas tasas de diabetes y fragilidad de huesos entre las mujeres, cosa que el ministerio de Sanidad dice querer combatir.
"El fútbol y el baloncesto son deportes que requieren mucho movimiento y salto", dijo el jeque Abdula al- Maneea, miembro del Consejo Supremo de Eruditos Religiosos, en un artículo de opinión publicado en el diario Okaz el jueves.

Dijo que movimientos tan excesivos podían perjudicar a chicas que todavía son vírgenes, causándoles posiblemente la pérdida de la virginidad.

"Hay una escuela de pensamiento que desafortunadamente existe y que ha distorsionado la interpretación del Islam", dijo Lina Al-Maeena, que organiza los entrenamientos de baloncesto en Yeda.

Los gimnasios para mujeres sólo pueden mantenerse dentro de los hospitales como "centros de salud" supervisados por el Ministerio de Sanidad, pero los precios son tan altos, al menos 1.000 riales (unos 200 euros) al mes, que sólo las mujeres con dinero pueden afrontar los gastos.

Versiones más baratas han salido bajo el nombre "salón de belleza" o "estudio", pero ahora su futuro está en duda.

Madawi Al-Hassoun, de la Cámara de Comercio de Yeda dijo que la cámara había estado intentando durante tres años encontrar un gobierno preparado para hacerse cargo de las licencias de los gimnasios femeninos.