PYONGYANG, 10 abril 2011 (AFP).- Corea del Norte ordenó a sus ciudadanos residentes en Libia quedarse ahí para impedir que a su vuelta difundan informaciones sobre las revueltas en Oriente Medio y el Norte de África en este país aislado del mundo, anunció este domingo la agencia de prensa surcoreana Yonhap.
En un mensaje enviado a su embajada en Libia, el gobierno de Pyongyang pide a los alrededor de 200 norcoreanos que trabajan en Libia que no intenten regresar a su país natal y que acaten las recomendaciones de las autoridades locales, señala la agencia, que cita una fuente experta en asuntos norcoreanos.
Corea del Norte, gobernada por un régimen comunista de inspiración estalinista, envía a cientos de sus ciudadanos a trabajar como médicos, enfermeros u obreros de la construcción a países productores de petróleo para tener una fuente de ingreso de divisas extranjeras.
Pyongyang y Trípoli mantienen relaciones muy estrechas y el líder libio Muamar Gadafi es considerado en el Norte de la península coreana como el "camarada revolucionario" del dirigente norcoreano Kim Jong-Il, según norcoreanos refugiados en el Sur.
Según los expertos y las asociaciones en contacto con los tránsfugas norcoreanos, desde comienzos del año, Pyongyang ha acentuado su control de las informaciones para evitar la difusión de noticias sobre las sublevaciones en los países árabes. Desde hace mucho tiempo los aparatos de radio y televisión con los que cuentan los norcoreanos sólo pueden recibir las estaciones estatales y el régimen controla estrechamente el acceso a internet.
Fotos: Rebelde con la bandera de Libia / Cartel del régimen de Corea del Norte (Agencias)