De acuerdo con la cadena ABC, William Yockey explicó que entró con su hija al baño, de tipo unisex y, mientras se lavaba las manos, la nena le avisó que había visto una cámara, que él comprobó estaba operando y grabando.
Inmediatamente, se lo comunicó al encargado que llamó a la policía que encontró el dispositivo con "forma de U" en el tubo de desagüe.
De acuerdo con esto, pidió un millón de dólares de indemnización al restaurante por negligencia, fallas en el control de la actividad de sus empleados, violación de la intimidad y por no supervisar correctamente el estado de sus instalaciones.
El portavoz de Starbucks, Alan Hilowitz, alegó que desde la empresa actuaron de forma correcta: "Cumplimos con nuestra obligación de proporcionar un local seguro, cuando nos avisaron, llamamos a la policía".
Aunque Hilowitz calificó al incidente de "raro", no es la primera vez que la cadena tiene problemas con la instalación de cámaras. Un hombre fue detenido en mayo pasado por colocar una en un Starbucks de California y filmar a más de 40 mujeres.
En junio de 2009 también ocurrió un episodio similar en Nueva York, con un empleado de la firma.
