Tras completar 110 días de protesta con el movimiento denominado "piernas cruzadas", en el kilómetro 18 del camino, de 57 kilómetros en total, se iniciaron hoy los trabajos que tendrán un valor de 40 mil millones de pesos (cerca de 20 millones de dólares).
Ante la presencia del ministro de Transporte, Germán Cardona, el gobernador de Nariño, Antonio Navarro Wolff, el alcalde de Barbacoas, José Preciado, ingenieros del Ejército, y representantes del Instituto Nacional de Vías (Invías), las 280 mujeres se quitaron las cadenas y las enterraron para dar por terminada la protesta.
El director del Invías, Carlos Rosado, aseguró que en la zona ya se encuentra la maquinaria y el personal que terminará las obras de reparación.
"Estamos atendiendo así el clamor de la comunidad y reiterando el compromiso que hiciera el presidente Juan Manuel Santos hace algunos días", dijo Rosado.
La jueza que lidera la protesta, Barybell Silva, señaló que varios enfermos que necesitaban atención médica murieron en el camino.
"En 2008 me tocó ver a una mujer de 23 años, embarazada, que murió con su bebé en medio del barro porque no pudo llegar a Pasto", recordó Silva.
Más de 80 mil habitantes de cuatro poblados del departamento de Nariño, cerca de la frontera con Ecuador, se beneficiarán con las obras de mantenimiento de la carretera que conecta a los municipios de Junín y Barbacoas al suroeste del país.
Durante 18 años los habitantes de Barbacoas, que se tardaban entre 15 y 20 horas para llegar a Pasto, la capital del departamento, esperaron a que las promesas de pavimentar la carretera se cumplieran.
El gobierno informó que las carreteras más afectadas por las lluvias, que en los últimos días se han intensificado, se encuentran en los departamentos de Santander (noreste) y Valle del Cauca (suroeste).
