BERLIN, 5 diciembre 2011 (DPA).- El trío neonazi alemán al que se atribuyen al menos diez asesinatos en la pasada década creó su propio "Monopoly", una versión antisemita y racista del popular juego de mesa, informan hoy medios alemanes.
Los radicales Uwe Mundlos y Uwe Böhnhardt, fallecidos misteriosamente a principios de noviembre en una caravana incendiada en el este de Alemania, y su compañera, Beate Zschäpe, desde la misma fecha en una prisión cerca de Colonia, diseñaron el juego Progomly y lo mandaron fabricar.
Era bien diferente al original Monopoly: empezaba en una cruz gamada, tenía paradas en campos de concentración en vez de en estaciones y casillas en las que se adjudicaban sádicas tareas como "dejar a los judíos apresados en el próximo campo de exterminio", indica el diario Bild en su edición de hoy.
Una cámara de gas costaba 3 mil, un campo de concentración 4 mil.
Quien dominaba los cuatro campos en los que se aniquilaba a judíos, gitanos y homosexuales, entre otros, podía exigir cuatro veces el precio de su alquiler.
Y si el jugador caía en la casilla de "visita del Führer" y gritaba bien alto Heil Hitler, se llevaba automáticamente todo el dinero depositado en el centro del tablero.
Según informaciones confirmadas por la Oficina de Protección de la Constitución de Turingia, un órgano dependiente del Ministerio del Interior que hace las funciones de servicios secretos, con los beneficios de su venta a radicales de derecha, el trío buscaba sufragar parte de los costes derivados de sus actividades delicitivas.
La misma oficina precisó que la célula extremista, proveniente de la ciudad de Jena, en el este de Alemania, creó el Progromly en 1997, un año antes de desaparecer en la clandestinidad durante 13 años, hasta hoy.
Existen indicios de que justo después de esa fecha, empezó a fabricar camisetas con lemas neonazis para seguir obteniendo ingresos, asegura Bild.
Los tres neonazis ya habían dejado atónita a la opinión pública alemana después de que se descubriera en la casa que compartían en la ciudad germano-oriental de Zwickau un bizarro vídeo creado con montajes de la Pantera Rosa, en la que la célula que se autodenominaba "Resistencia Nacionasocialista" reivindicaba los asesinatos y se burlaba de las víctimas mostrando sangrientas fotografías de sus cadáveres.
El trío asesinó entre 2000 y 2006 a ocho turcos y a un griego. En 2007 mató a una mujer policía. Las autoridades alemanas detuvieron a cuatro presuntos cómplices hasta el momento.