MÉXICO, 21 diciembre 2012 (Excelsior).- El megabuscador también se sumó a la mística fecha con su tradicional doodle, que recuerda el fin del 13 baktún de los Mayas. Miles de personas ya celebran el "amanecer cósmico", que estuvo revuelto por profesías apocalípticas
El 13 B’aktun maya es el inicio de la decimotercera era de la historia según las creencias de la civilización Maya.
La celebración del "amanecer cósmico" comenzó con un accidente que hizo caer el fuego sagrado con el que se buscaba honrar la conclusión de un largo conteo en el calendario maya, prevista para el viernes.
Gabriel Lemus, el guardián de la flama, se quemó un dedo con la incendaja y luego alguien dejó que un tronco se saliera del brasero ceremonial, donde se quemaba, y cayera en el escenario de madera, antes de levantarlo rápidamente.
Pese a ello, Lemus, de cabello cano y vestimenta blanca, está convencido de que las condiciones son propicias para el buen comienzo de una "Nueva Era", aproximadamente a las 5:00 de la madrugada del viernes.
Lo mismo opinó la mayoría de los 1.000 asistentes a la ceremonia, un público demísticos variopintos, entre chamanes, videntes, astrólogos, yoguis, sufíes, suamisy promotores del uso de cristales de cuarzo para la suerte y la salud, en un centro de convenciones de la ciudad de Mérida, aproximadamente a hora y media de las ruinas mayas de Chichén Itzá, en auto.
"Es un amanecer cósmico", recalcó Lemus. "Vamos a recuperar la capacidad de comunicarnos telepáticamente... y levitar cosas, como lo hacían nuestros abuelos".
Estas personas no creen que el mundo vaya a acabarse este viernes. Después de todo, la conclusión de las ceremonias está prevista para el 23 de diciembre.
En vez de ello, dicen los participantes, están ahí para celebrar el nacimiento de una nueva era.
Un visionario indígena mexicano, llamado Ac Tah, que ha recorrido varias zonas de México para construir pirámides pequeñas a las que llama circuitos neurológicos, dice tener "grandes esperanzas" sobre el 21 de diciembre.
"Nos estamos preparando para recibir un gran campo magnético del centro de la galaxia", afirmó.
Terry Kvasnik, de 32 años, es acróbata y doble de cine. Llegó desde Manchester,Inglaterra, para atestiguar este comienzo de la nueva era y tiene un lema para vivir lajornada que transformará la humanidad.
"Estar enamorado, no atemorizado", dijo Kvasnik, quien no sabe todavía a qué ceremonia asistirá el viernes pero sí puede garantizar algo, con una sonrisa. "Estaré en el lugar más feliz que pueda".