Los cisnes vulgares o cisnes mudos, con elegantes y largos cuellos y plumas blancas impolutas, fueron introducidos por los europeos hace dos siglos por su bella y decorativa estampa.
Sin embargo, aunque estos bonitos cisnes ya se han convertido en parte de la ciudad, destrozan el hábitat de los patos y gansos nativos de la zona y atacan a otras aves acuáticas e incluso a paseantes.
Por eso el Departamento de Conservación ha propuesto declarar al cisne una "especie invasora prohibida" y pretende eliminar todas las especies en el estado antes de 2025, dijo el NYT.
En cuanto al modo de sacrificar a los cisnes se espera un plan para el final de este año, pero ya se sabe que habrá que rociar de aceite los huevos para evitar su eclosión.
Esta iniciativa por parte del gobierno estatal ha suscitado un gran debate entre los conservacionistas y los defensores de las aves, mientras que las autoridades están afrontando un auténtico desafío a la hora de educar a los ciudadanos sobre lo dañinos que pueden llegar a ser estos cisnes.
Los propietarios que tengan cisnes en sus espacios privados podrán mantener a estas aves en sus propiedades siempre que no salgan y no procreen.
Además, informó el New York Times, algunos parques públicos podrán mantener a los cisnes mudos siempre que prevengan su reproducción.
Muchos conservacionistas defienden la nueva propuesta del gobierno estatal ya que, según defienden, el número de cisnes se ha triplicado durante los últimos treinta años a pesar de que en 1993 se aplicó un plan de reducción de la población en el que se roció aceite los huevos y se expulsó a los cisnes de zonas silvestres.
Mike Burger, director de conservación y ciencia de la organización conservacionista Audobon, explicó que están "muy de acuerdo con el plan" porque, aunque normalmente no abogan por los métodos letales, en este caso estas prácticas "son necesarias".
Por su parte, la asociación defensoras de animales GooseWatch NYC ha denunciado la propuesta y más de dos docenas de organizaciones están aún estudiándola.
Sin embargo, aunque estos bonitos cisnes ya se han convertido en parte de la ciudad, destrozan el hábitat de los patos y gansos nativos de la zona y atacan a otras aves acuáticas e incluso a paseantes.
Por eso el Departamento de Conservación ha propuesto declarar al cisne una "especie invasora prohibida" y pretende eliminar todas las especies en el estado antes de 2025, dijo el NYT.
En cuanto al modo de sacrificar a los cisnes se espera un plan para el final de este año, pero ya se sabe que habrá que rociar de aceite los huevos para evitar su eclosión.
Esta iniciativa por parte del gobierno estatal ha suscitado un gran debate entre los conservacionistas y los defensores de las aves, mientras que las autoridades están afrontando un auténtico desafío a la hora de educar a los ciudadanos sobre lo dañinos que pueden llegar a ser estos cisnes.
Los propietarios que tengan cisnes en sus espacios privados podrán mantener a estas aves en sus propiedades siempre que no salgan y no procreen.
Además, informó el New York Times, algunos parques públicos podrán mantener a los cisnes mudos siempre que prevengan su reproducción.
Muchos conservacionistas defienden la nueva propuesta del gobierno estatal ya que, según defienden, el número de cisnes se ha triplicado durante los últimos treinta años a pesar de que en 1993 se aplicó un plan de reducción de la población en el que se roció aceite los huevos y se expulsó a los cisnes de zonas silvestres.
Mike Burger, director de conservación y ciencia de la organización conservacionista Audobon, explicó que están "muy de acuerdo con el plan" porque, aunque normalmente no abogan por los métodos letales, en este caso estas prácticas "son necesarias".
Por su parte, la asociación defensoras de animales GooseWatch NYC ha denunciado la propuesta y más de dos docenas de organizaciones están aún estudiándola.
Foto: Referencial, tomada de friendsofanimals.orgFuente: http://es.noticias.yahoo.com/york-pretende-eliminar-2-200-cisnes-ser-quot-194012269.html
