No obstante, tras ser acusado, Koessler no puede tener contacto con su hija que ahora está en cuidados intensivos porque su salud ha empeorado.
Casi 40.000 personas han firmado una petición solicitando al primer ministro de Queensland y al ministro de Justicia, Jarrod Bleijie, que intervengan, afirmando que es "inhumano e injusto" alejar al padre de su hija "durante una enfermedad tan grave".
Casi 40.000 personas han firmado una petición solicitando al primer ministro de Queensland y al ministro de Justicia, Jarrod Bleijie, que intervengan, afirmando que es "inhumano e injusto" alejar al padre de su hija "durante una enfermedad tan grave".