domingo, 12 de octubre de 2008

Encuentran bactería que podría sobrevivir en marte y en el espacio. No usa oxigeno, luz ni depende de otras formas de vida.

HOUSTON, 11 octubre 2008 (BBC).- La han llamado "la audaz viajera" y es que tiene la increíble capacidad de vivir en completo aislamiento, sin oxígeno, en total oscuridad y a 60 grados centígrados de temperatura. Se trata de la bacteria Candidatus Desulforudis audaxviator, descubierta en una mina de oro en Sudáfrica a casi tres kilómetros bajo la superficie terrestre.


Los científicos creen que este microorganismo es el primer ecosistema de una sola especie descubierto en la Tierra. Y sus inusuales características podrían brindar información valiosa sobre la vida en otros planetas.

"Una comunidad de una sola especie es algo inédito en el mundo de los microbios", afirma Carl Pilcher, director del Instituto de Astrobiología de la NASA cuyo equipo llevó a cabo el descubrimiento hace dos años.

"Porque significa que la única especie del ecosistema debe extraer todo lo que necesita para vivir de un medio ambiente que está muerto"


Según el experto, todos los otros ecosistemas de la Tierra que no usan luz solar para sobrevivir utilizan algún producto de la fotosíntesis.

Pero la D. audaxviator no obtiene su energía del Sol sino de otros elementos que la rodean, señalan los investigadores del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley, en California, quienes llevaron a cabo la secuenciación del ADN de la bacteria.

Tal como afirman los científicos en la revista Science, la bacteria sobrevive gracias a la desintegración radioactiva de uranio en las rocas adyacentes.

"Una pregunta que surge cuando consideramos la capacidad de otros planetas de albergar vida es si los organismos pueden existir de manera independiente, sin tener acceso ni siquiera al sol. La respuesta es sí, y aquí está la prueba"
Dylan Chivian


De éstas obtiene hidrógeno y sulfato y puede construir sus propias moléculas orgánicas a partir del agua, y carbón inorgánico y nitrógeno a partir del amoniaco de las rocas y líquidos que la rodean.

Tal como señalan los científicos, el largo recorrido de esta audaz viajera hacia las profundidades de la Tierra la ha preparado con genes sumamente versátiles.

Y gracias a estos ha podido enfrentar una serie de distintas condiciones, incluida la capacidad para obtener nitrógeno directamente del nitrógeno elemental del medio ambiente.

Tanto el carbono como el nitrógeno son estructuras básicas de la vida y se utilizan en la formación de proteínas y aminoácidos.

Los científicos creen que D. audaxviator podría tener la clave de la vida en otros planetas. La bacteria, que tiene forma cilíndrica, fue descubierta en una muestra de miles de litros de agua recuperada en la Mina Mponeng.

"Sabíamos, por estudios previos que hicimos con técnicas de biología molecular en esta mina, que parecía haber comunidades muy simples viviendo allí abajo" afirma Dylan Chivian, principal autor del estudio.

"Tomamos la muestra de agua y esperábamos poder secuenciar el genoma entero de la especie más dominante, o quizás de 70% a 80% del genoma de varias especies".

"Pero en lugar de esto, lo que descubrimos fue que había un solo organismo presente en la muestra".

"Más del 99,9% del ADN de la muestra provenía de un simple organismo y el resto parecerían ser rastros de contaminación de la mina y el laboratorio", afirma el investigador.

Los científicos esperan ahora que la D. audaxviator pueda ofrecer la clave de la vida en otros planetas.

La bacteria no puede procesar oxígeno, explica el científico, lo cual sugiere que durante mucho tiempo no ha sido expuesta al oxígeno puro.

Además, el agua en la que vive no ha visto la luz del día en más de 3 millones de años, lo cual indica lo antigua que es esta especie.

Los científicos creen que D. audaxviator representa al tipo de organismo que podría sobrevivir bajo la superficie de Marte o en una de las lunas de Saturno, Enceladus.