martes, 15 de junio de 2010

Novillero termina en la carcel por negarse a matar al toro

MÉXICO, 15 junio 2010 (DPA).— El novillero mexicano de 22 años Christian Hernández terminó en la cárcel por negarse a matar el segundo toro que le tocaba lidiar en la Plaza México, informaron hoy medios deportivos mexicanos.

"Estoy firme en mi decisión, me dio mucho miedo y ya no quiero ser torero", dijo el novillero en declaraciones que difunde hoy el diario "Reforma".

El joven espada dejó ir vivo al primer astado y al segundo le dio un muletazo y luego se tiró de cabeza al callejón, del cual salió para sólo cortarse la coleta o el añadido en señal de retiro.

Hernández, quien ya se había presentado la temporada pasada en la plaza y había sufrido una fuerte cornada en una pierna en su estado natal de Querétaro, fue detenido por faltar al reglamento taurino y llevado a la delegación.

"Hice mi declaración frente al juez. Le expliqué que tuve mucho miedo y que no podía matar a ese novillo. Para los taurinos puede ser un hecho inexplicable, pero para mí está perfectamente claro", comentó.

Y añadió: "La profesión que yo creí que era mía no lo es, respeto y admiro a todos los toreros, hay que tener muchos... (valor) para ponerse delante de un toro, y a mí, hoy, me faltaron".

Tras su presentación el domingo ante un juez cívico y al no haber una denuncia de la empresa de la Plaza México, Hernández pagó una multa y salió libre.

Los otros toreros en la novillada fueron Alfonso Mateos y David Aguilar.