TOKIO, 30 agosto 2010 (AP).— Los residentes de dos poblados turísticos vecinos en el centro de Japón están luchando contra un mono que ha mordido a decenas de personas en las últimas semanas, pero el animal parece estar ganándoles la pelea.
Cerca de 60 personas en los pueblos de Mishima y Susono cerca de la hermosa península Izu y el monte Fuji han sufrido la mordida del macaco desde mediados de agosto, principalmente en las pantorrillas.
Mishima está publicando diariamente un alerta de "mordida de mono" en la página electrónica del pueblo, señalando dónde fue visto el animal por última vez y recomendándole a los vecinos que mantengan sus puertas y ventanas cerradas.
Cansados de las andanzas del mono, un grupo de 130 funcionarios, incluyendo policías y guardianes de animales, realizaron una búsqueda el domingo con la esperanza de capturar al animal, pero a pesar de los equipos —muchos vinieron armados con binoculares, mallas y pistolas con tranquilizantes— no pudieron encontrar al animal.
"Terminamos sin poder atrapar a un mono, o encontrar a uno", dijo el funcionario Yuki Omori de Susono.
Dijo que los ataques han sido reportados desde el viernes. Las autoridades sospechan que el macaco puede haberse retirado hacia las montañas, de donde se cree que vino en un principio.
"Los monos locales han causado daños en las cosechas en el pasado, pero por lo general son pacíficos y nunca atacan a la gente", dijo Omori. "Debe de haber venido de otra parte".
Funcionarios en Mishima continúan alertas y han plantado trampas en caso de que el animal retorne.
El mono es un macaco de un tipo común en Japón y puede llegar a medir un metro de largo (tres pies) al pararse.
Los monos han ocasionado molestias a los residentes de áreas locales de Japón, robando comida y dañando plantaciones. En años recientes, han sido vistos en el centro de Tokio.
Foto: Figura de origamí Macaco por Hideo Komatsu
Mishima está publicando diariamente un alerta de "mordida de mono" en la página electrónica del pueblo, señalando dónde fue visto el animal por última vez y recomendándole a los vecinos que mantengan sus puertas y ventanas cerradas.
Cansados de las andanzas del mono, un grupo de 130 funcionarios, incluyendo policías y guardianes de animales, realizaron una búsqueda el domingo con la esperanza de capturar al animal, pero a pesar de los equipos —muchos vinieron armados con binoculares, mallas y pistolas con tranquilizantes— no pudieron encontrar al animal.
"Terminamos sin poder atrapar a un mono, o encontrar a uno", dijo el funcionario Yuki Omori de Susono.
Dijo que los ataques han sido reportados desde el viernes. Las autoridades sospechan que el macaco puede haberse retirado hacia las montañas, de donde se cree que vino en un principio.
"Los monos locales han causado daños en las cosechas en el pasado, pero por lo general son pacíficos y nunca atacan a la gente", dijo Omori. "Debe de haber venido de otra parte".
Funcionarios en Mishima continúan alertas y han plantado trampas en caso de que el animal retorne.
El mono es un macaco de un tipo común en Japón y puede llegar a medir un metro de largo (tres pies) al pararse.
Los monos han ocasionado molestias a los residentes de áreas locales de Japón, robando comida y dañando plantaciones. En años recientes, han sido vistos en el centro de Tokio.
Foto: Figura de origamí Macaco por Hideo Komatsu