TAIPEI, 26 octubre 2010 (Agencias).- Chen Wei-yih posó para muchísimas fotografías, en un hermosos vestido blanco.
Se enlistó en un plan de boda y rentó un salón de banquete para un festejo de boda en el que invitó a 30 amigos... pero no hay novio.
¡Chen se casará consigo misma!
Desalentada por el hecho de que no empataba con los hombres que conocía, pero encarando a la vez la presión social de que llegó a la edad en que es “obligatorio” casarse: 30 años, entonces la novia decidió celebrar una boda... consigo misma.
“Los treinta es un periodo importante para mi. Mi trabajo y mi experiencia están en excelente forma, es formidable, pero no he encontrado a nadie para compartir mi vida.
¿Qué puedo hacer?”, dijo Chen. “No es que sea “antimatrimonio”. Espero poder transmitir una idea diferente sobre lo lazos de una tradición.
Su boda de 5 mil 675 dólares ha atraído publicidad y mil 800 comentarios de empatía con su situación.
Sólo 40 por ciento de las mujeres que fueron entrevistadas al inicio de este año por una secretaría del gobierno de educación, dijeron que imaginaban que las personas casadas pueden vivier mejor que las solteras.
“Espero que más personas nos estemos amando más a nosotras mismas que a la idea de estar con otra persona por la presión social”, dijo Chen, quien se irá en una solitaria luna de miel a Australia.
Chen dijo que su madre insistió en que obtuviera un novio al principio de todo eto, pero finalmente aceptó el plan de boda solitaria de su hija.
Ahora que, como Chen no puede registrarse oficialmente como legalmente casada consigo misma, si alguna vez encuentra a un hombre con el que quiera compartir su vida, se casará otra vez.
“Si tuviera un novio estable, no haría esto. Sería ofensivo para él, como quiera”, dijo Chen.
Fotos: Chen Wei-yih en su traje de novia (Facebook)