AUGUSTA, 6 octubre 2010 (DosManzanas.com).- Jennifer Keeton demandó a la universidad en que estudiaba por no permitirle imponer sus convicciones religiosas homofóbicas a los alumnos que acudían a ella en calidad de consejera académica, pero un juez federal otorgó la razón a la institución académica. Ahora, en pleno proceso de apelación, ni más ni menos que el Ku Klux Klan muestra públicamente su apoyo a la estudiante.
La estudiante de 24 años que en su labor de consejera a otros estudiantes se negaba a tratar adecuadamente a gays y lesbianas, ya que “la homosexualidad es inmoral y curable”. Su universidad, la Augusta State University, le ofreció continuar en su puesto a cambio de recibir un curso sobre diversidad sexual, decisión por la que Keeton demandó a la institución. La estudiante perdió el caso y ahora, mientras ella y sus abogados en el homofóbo Alliance Defence Fund intentan apelar, un apoyo inesperado acaba de llegarle por parte del Ku Klux Klan.
En efecto, dicho colectivo -mundialmente conocido por su xenofobia, racismo, homofobia y antisemitismo- celebrará una concentración el próximo 23 de octubre frente a la entrada de la sede universitaria, para mostrar su apoyo a la estudiante. El KKK coincide con Keeton en que la decisión judicial contraria a la estudiante viola la Primera Enmienda a la COnstitución de los Estados Unidos, que impide a cualquiera de los tres poderes prohibir la libertad de culto, de expresión, de prensa, de reunión, o de petición. Según la organización la estudiante no guarda relación con ellos, pero fueron contactados por alguien que conocía su situación.
Foto: Jennifer Keeton (Agencias)