CIUDAD DE MÉXICO, 9 de junio 2011 (EFE).- La Virgen de Guadalupe ha sido visto en un pedazo de pan, una tortilla, cristales, espejos, en pisos y árboles. Ahora, apareció debajo de un viaducto cerca de la costa, en el condado de San Diego, California.
Al lado de una carretera muy transitada en Encinitas, California, el viernes previo a la Semana Santa, un equipo colocó mosaicos para formar la figura de la Virgen de Guadalupe en una tabla de surf, sobre una enorme ola y con la leyenda "Cuida el océano".
El mosaico es intrincado y hermoso. Las piedras y el vidrio que el artista eligió para el rostro de la Virgen le dan una especie de mirada beatífica. Sus manos tienen nudillos de piedra.
El problema es que la pieza... es ilegal.
El alcalde de Encinitas, James Bono, dice que la obra "reúne los requisitos para el graffiti y viola la ley ", y cree que de permitirse su presencia en el lugar sentaría un mal precedente.
Bono ha recibido cientos de correos electrónicos sobre el mosaico. La mayoría, dice, le pide que lo dejen. Pero él cree que algunos advierten que el arte religioso no tiene cabida en la propiedad pública.
Unos pocos han dicho que la pieza es un sacrilegio. "Por lo tanto, nos pone en una posición incómoda", señala Bono.
Las autoridades esperan que la pieza pueda ser mostrada al público en un negocio local.
Por su parte los comercios locales han recaudado fondos para cubrir los gastos que represente para la ciudad el retiro del mosaico y varias personas han dicho que están dispuestas a comprar la pieza.
El restaurador asistente Andrew Smith, de Sculpture Conservation Studio, con sede en Los Angeles, dijo que su agencia recomendará a las autoridades de Encinitas que mantengan la pieza de arte y además que adopte un plan para protegerla.
Mientras, los devotos del mural claman por un milagro.
viernes, 10 de junio de 2011
La guadalupana 'surfista' enciende la polémica en... San Diego
1:59:00 a.m.
Estados Unidos