WASHINGTON, 18 octubre 2011 (EFE).- Las autoridades del condado de Riverside, en California (EE.UU.), aprobaron hoy prohibir que las personas con antecedentes por agresión sexual repartan caramelos a los niños o pongan adornos en sus casas durante la fiesta de Halloween.
Según una ordenanza emitida por las autoridades de Riverside y que entró en vigor de manera inmediata, esas personas no podrán abrir la puerta a los niños que se disfrazan en Halloween y van por las casas pidiendo caramelos.
Tampoco se les permitirá colocar decoraciones alusivas a Halloween en sus casas durante el día 31 de octubre, que es cuando se celebra en EE.UU. esa tradicional fiesta.
Además, se les prohíbe encender luces decorativas en la noche de Halloween.
"Si esas personas no pueden decorar sus casas, si no pueden encender sus luces, entonces los niños no van a parar allí", argumentó Cynthia Ferry, una residente de Riverside, a la prensa local.
En ese condado están registrados unos 3.500 delincuentes sexuales, según la controvertida Ley Megan de California, que obliga a los condenados por delitos sexuales a comunicar en todo momento su lugar de residencia, independientemente del tiempo que haya pasado y de si han cumplido ya su pena.