PARÍS, 7 octubre 2011 (AFP).- Una excepcional lluvia de estrellas fugaces podrá verse el sábado por la noche en Europa y en Asia Central, un evento que no volverá a reproducirse hasta dentro de 40 años, anunció el viernes el Observatorio de París.
Entre 60 y 600 estrellas fugares por hora -una a diez por minuta- podrían ser vistas, según los astrónomos.
Se esperan dos picos: a las 17H09 GMT y a las 19H57 GMT, según cálculos del Instituto de mecánica celeste (IMCCE/Observatorio de París).
En Europa Occidental, el primero podría diluirse en la luz del crepúsculo. Sin embargo, el segundo debería ser perfectamente visible, salvo en caso de nubes, y eso pese a una Luna brillante. La intensa lluvia de estrellas fugaces debería prolongarse hasta las 21H00 GMT.
El sábado al principio de la noche, la Tierra debe entrar en una nube de restos dejados por el cometa 21P/Gicobini-Zinner, descubierto en 1900.
"Millones de polvos penetrarán en el atmósfera a una velocidad de 80.000 km/hora y permitirán a los apasionados contabilizar hasta 600 meteoritos por hora", un evento "que no volverá a ocurrir hasta dentro de 40 años", explica el Observatorio de París.
Al frotar en el aire, estos polvos se calientan y se volatilizan: es el fenómeno de las estrellas fugaces, flechas de fuego incandescentes.
Menos conocidas que las Perseidas, que vuelven cada año en el mes de agosto, las Dracónidas que serán visibles el sábado varían fuertemente en intensidad según los años. Todo depende de si la Tierra pasa dentro de la nube de polvo dejada por el cometa o al lado, explica el astrónomo François Colas.
En 1933 y 1946, se habían registrado unas "lluvias de Dracónidas históricas" con "más de 10.000 meteoros por hora".
Con motivo de la nueva lluvia intensa esperada el sábado, un avión equipado con una decena de cámaras tiene previsto sobrevolar durante ocho horas las nubes al norte de Noruega, en el marco de una misión europea, precisa el Observatorio de París, al origen de la iniciativa.
La cometa 21P/Gicobini-Zinner vuelve cada 6,6 años a proximidad de la Tierra y del Sol. Su último paso se remonta al 2 de julio de 2005. El próximo está previsto para el 11 de febrero de 2012.
Se esperan dos picos: a las 17H09 GMT y a las 19H57 GMT, según cálculos del Instituto de mecánica celeste (IMCCE/Observatorio de París).
En Europa Occidental, el primero podría diluirse en la luz del crepúsculo. Sin embargo, el segundo debería ser perfectamente visible, salvo en caso de nubes, y eso pese a una Luna brillante. La intensa lluvia de estrellas fugaces debería prolongarse hasta las 21H00 GMT.
El sábado al principio de la noche, la Tierra debe entrar en una nube de restos dejados por el cometa 21P/Gicobini-Zinner, descubierto en 1900.
"Millones de polvos penetrarán en el atmósfera a una velocidad de 80.000 km/hora y permitirán a los apasionados contabilizar hasta 600 meteoritos por hora", un evento "que no volverá a ocurrir hasta dentro de 40 años", explica el Observatorio de París.
Al frotar en el aire, estos polvos se calientan y se volatilizan: es el fenómeno de las estrellas fugaces, flechas de fuego incandescentes.
Menos conocidas que las Perseidas, que vuelven cada año en el mes de agosto, las Dracónidas que serán visibles el sábado varían fuertemente en intensidad según los años. Todo depende de si la Tierra pasa dentro de la nube de polvo dejada por el cometa o al lado, explica el astrónomo François Colas.
En 1933 y 1946, se habían registrado unas "lluvias de Dracónidas históricas" con "más de 10.000 meteoros por hora".
Con motivo de la nueva lluvia intensa esperada el sábado, un avión equipado con una decena de cámaras tiene previsto sobrevolar durante ocho horas las nubes al norte de Noruega, en el marco de una misión europea, precisa el Observatorio de París, al origen de la iniciativa.
La cometa 21P/Gicobini-Zinner vuelve cada 6,6 años a proximidad de la Tierra y del Sol. Su último paso se remonta al 2 de julio de 2005. El próximo está previsto para el 11 de febrero de 2012.
Foto: © Jsternig | Dreamstime.com