domingo, 23 de septiembre de 2012

Bella pintora del S.XVII es seducida y violada por su maestro, se venga con famosa pintura



MÉXICO, 23 septiembre 2012 (El Universal/Yahoo).- Mentiras, traición, deslealtad, robo, muertes, incesto... Parecieran los ingredientes ideales para una novela, pero como bien dicen "la realidad supera la ficción". Es la historia de la que fue parte de la vida de Artemisia Gentileschi, un pintora caravaggista italiana, quien, cuando apenas iniciaba su carrera en el arte, fue engañada y violada.

Era hija de Orazio Gentileschi, también pintor caravaggista, quien vio que su primogénita se inclinaba al arte y tenía talento, así que decidió pedirle ayuda a uno de sus amigos para que ella se preparara en el mundo de la pintura: Agostino Tassi.

Orazio, sin embargo, no imaginaba todo lo que eso implicaría. En 1612 mandó una carta al papa Pablo V que decía: "Una hija del suplicante ha sido desflorada a la fuerza y conocida carnalmente muchas veces por Agostino Tassi, pintor, amigo íntimo y colega del suplicante".

El padre de Artemisia estaba pidiendo justicia porque su hija había sido violada por su supuesto amigo y además engañada pues se le había prometido matrimonio; por eso pedía la intervención el papa, exigiendo justicia.

El caso fue tomado y se inició un juicio que duró siete meses. Por supuesto que el caso se volvió uno de los mayores escándalos en la época. Era Tassi contra Artemisia de 16 años.

Para comprobar de todo lo que se le acusaba al pintor, se necesitó del testimonio de varias personas involucradas en el caso, con lo que se logró descubrir la verdadera identidad de Agostino Tassi, quien iba más allá de ser un simple pintor.

Se supo que se trataba de un verdadero criminal que no sólo le daba rienda suelta a su deseo carnal.

Por ejemplo, el testimonio de Giovanni Battista Stiattesi destapó una historia escalofriante del pasado del pintor, quien también era su amigo. Tassi estaba casado cuando se enteró que su mujer cometía adulterio, así que decidió contratar unos sicarios para asesinarla.

Cuando lo cumplió, se mudó a Roma y ahí mantuvo una relación sexual con la hermana de su esposa muerta. Había cometido incesto, pues así era considerado en la época. Eso fue lo que relató Battista Stiattesi y por lo que Tassi fue juzgado y condenado, además de la acusación de Artemisia.

Las pruebas estaban ahí y Agostino Tassi fue condenado a prisión, pero por tan sólo un año, el cual no cumplió porque a los 8 meses ya estaba libre de nuevo. Y aunque todo esto sí fue un gran escándalo, no repercutió en la carrera de Tassi, pues justo después de haber salido de la cárcel, inició una ola de éxito profesional para él pues fue invitado a decorar las paredes de las casas de las familias más importantes de Roma.

Pero eso no significó que Tassi hubiera cambiado su conducta delictiva, pues nuevamente se le volvió a juzgar por conductas criminales en 1619, 1622 y 1630. Una de las acusaciones venía por parte de una prostituta, quien decía que el pintor la había mordido, golpeado y robado en su casa.

Pero, ¿qué pasó con Artemisia? Luego de pasar un mal trago durante su juventud, se convirtió en una pintora destacada y reconocida, a pesar de ser mujer en una época donde las féminas no tenían muchos beneficios.

Aún así, logró convertirse en la primera mujer miembro de la Academia di Arte del Disegno de Florencia, donde conoció y mantuvo amistado con científicos como Galileo Galilei, además de trabajar en cortes europeas.



Uno de sus trabajos más famosos es el cuadro "Judith decapitando a Holofernes" (En la foto), de quien muchos aseguran se trata de una manifestación del odio que le tenía a Agostino Tassi.