MÉXICO, 25 junio 2014 (El Universal).- Las imágenes se suceden: hinchas en sillas de ruedas, que disponen de zonas especiales en los partidos del Mundial, se ponen de pie para celebrar, reclamar o, incluso, tener más ángulo de visión.
Un "milagro" que no le gustó a la FIFA ni a las autoridades de Brasil, que anunciaron una investigación al respecto, por un posible fraude en la compra de entradas mundialistas.
"No creemos que sea un milagro, más bien, pensamos que nos están engañando" , se quejó Thierry Weil, director de marketing de la FIFA.
La policía ya inició una investigación, a partir de las imágenes que circulan en las redes sociales y observando las grabaciones de las cámaras de seguridad del estadio Castelao, de Fortaleza, sede del duelo entre Brasil y México.
La teoría que manejan las autoridades es que hubo discapacitados que compraron boletos -para los que necesitaban un certificado oficial del país-, que luego los vendieron en el mercado negro.