NUEVA DELHI, 15 septiembre 2008 (El País).- Fuerzas policiales de la ciudad de Agra, en el norte de la India, se afanan en recuperar documentos importantes tras el asalto perpetrado contra la comisaría del superintendente por parte de una violenta banda de monos.
El asalto tuvo lugar el domingo y la Policía tuvo que solicitar refuerzos adicionales para acabar con la ofensiva simiesca, antes de instalar redes y verjas para asegurar las instalaciones, donde reposan documentos con valor judicial, según la agencia india IANS.
En Agra, la ciudad donde se encuentra el famoso Taj Mahal, los monos han causado más de un dolor de cabeza a sus residentes, que iniciaron incluso una campaña hace un año para devolverlos a la jungla.
"Las mujeres y los niños de la parte vieja tienen mucho miedo. Los monos son violentos y cada día recibimos numerosas quejas", dijo a IANS el jefe del departamento animal, Ravindra Choudhary.
La iniciativa para devolver a los simios a la selva quedó paralizada tras la entrada en liza de la defensora de los animales Maneka Gandhi, y hoy miles de monos campan todavía a sus anchas por los barrios del centro de Agra.
"Muchos turistas han sido atacados y mordidos por los monos, pero las autoridades no hacen nada para detenerlos y están proliferando", se quejó un guía turístico identificado como Raju.