viernes, 22 de abril de 2011

El extraño caso del asesinato de la Familia de Nantes



NANTES, 22 abril 2011 (AP/Europress).— La mujer y sus cuatro hijos cuyos cadáveres fueron descubiertos el jueves enterrados en el jardín de su vivienda en Nantes (oeste de Francia) fueron víctimas de "una ejecución metódica", según la justicia, que sigue buscando al padre.
"La autopsia de los cinco cuerpos, que ya ha concluido, ha demostrado que estamos frente a una ejecución metódica", declaró el viernes por la noche el fiscal de Nantes, Xavier Ronsin.
"Fueron asesinados con un arma de fuego cuando dormían", precisó el fiscal. Cada víctima recibió, al menos, dos disparos: uno en la cabeza y otro en el pecho, según la misma fuente.
La policía francesa sigue buscando intensamente en el sur del país, donde se halló su coche, al hombre que decía ser agente secreto y que está desaparecido desde principios de abril, tras el hallazgo en una vivienda de Nantes del cadáver de su esposa y sus cuatro hijos.
Xavier Dupont de Ligonnès, de 50 años de edad, descendiente de la nobleza francesa, está siendo buscado por la policía para esclarecer lo ocurrido a sus cuatro hijos de 13 a 21 años y a su esposa, de 49 años.
Por el momento, la justicia no le acusa de la matanza, "pero su testimonio es esencial para confrontar las hipótesis de trabajo de los investigadores con su declaración", apuntó Ronsin.
El viernes, uno de los vehículos de la familia fue descubierto en el aparcamiento de un hotel en Roquebrune sur Agens, en el departamento de Var (sureste de Francia), en el otro extremo del país, adonde la familia había vivido antes de instalarse en Nantes.
Las investigaciones se orientaron hacia esa zona luego de detectar una extracción de dinero allí el 14 de abril, precisó una fuente cercana a las investigaciones.
"Todo es posible" pues la situación es aún "confusa", indicaba el jueves a la AFP otra fuente cercana a las pesquisas.
Según Ronsin, la noche del 12 de abril el hombre buscado cenó solo y durmió en un albergue en Pontet, departamento de Vaucluse (sudeste). El 14 de abril retiró 30 euros en un cajero automático de Roquebrune sur Agens.
"El 15 de abril, después de pasar la noche en un hotel Formule 1" (una cadena de hoteles baratos), Xavier Dupont de Ligonnès "abandonó solo su habitación y dejó su vehículo en las cercanías sin tocarlo desde entonces", dijo el fiscal.
Un vecino de la familia, Fabrice, explicó a la AFP que hace 15 días vio a Xavier de Ligonnès vestido con un short y zapatos naúticos colocando "enormes bolsos en el coche". Explicó que a su esposa, Agnès, madre de los cuatro hijos, la vio por última vez el domingo 4 de abril.
A partir de esa fecha la familia ya no fue vuelta a ver.
Lejos de pensar en un ataque de locura, los investigaciones parecen inclinarse hacia un escenario preparado minuciosamente: el contrato de alquiler de la vivienda fue rescindido; los amigos y la dirección de la escuela a la que iban los más pequeños fueron advertidos por carta que la familia se mudaba al extranjero.
Uno de los primeros elementos que llamó la atención de la policía fueron las explicaciones que el padre de familia, que afirmaba ser agente secreto, habría dado a su entorno: el traslado profesional a Australia o Estados Unidos en el marco de un "programa de testigos protegidos".
Los investigadores están además elaborando un estudio de personalidad del padre para intentar determinar algunos elementos que todavía son confusos.
Según el fiscal, Xavier Dupont de Ligonnès estaba a menudo ausente del hogar por razones profesionales. Según la policía judicial, habría sido gerente de una pequeña empresa, otras informaciones dicen que trabajaba en el turismo o en la hostelería.

Video: EuroPress / Imágenes: AP



Lugar del asesinato (AFP/Google Maps)