martes, 9 de agosto de 2011

Panadero francés inventa expendedora automática de baguettes

PARIS, 8 agosto 2011 (AP) — Francia es donde originó el baguette, el sabroso y crujiente pan célebre de la gastronomía, pero es casi imposible obtener uno fresco en las noches, durante los días festivos o incluso en agosto, cuando cierran muchas de las 33.000 panaderías del país.
Jean-Louis Hecht piensa que ha encontrado una solución. El panadero del noreste de Francia ha inventado una expendedora automática de baguettes que funciona las 24 horas, prometiendo pan caliente para la gente despierta de noche, los trabajadores de turnos nocturnos o aquellos que simplemente no tienen tiempo de comprar su pan en el momento que abren las panaderías.
"Esta es la panadería del futuro", proclamó Hecht, quien prevé una expansión de su producto en París, a través de Europa e incluso en Estados Unidos. "Si los otros panaderos no quieren entrar a este mercado, serán vencidos".
Por el momento, sin embargo, eso no es más que habladuría.
Hecht opera solamente dos máquinas —una en París y otra en el pueblo de Hombourg-Haut, en el noreste de Francia— ambas a lado de sus propias panaderías. Las expendedoras usan una barra de pan parcialmente cocida, la hornean y la entregan caliente a los clientes en cuestión de segundos, todo por el precio de un euro (1,42 dólares).
A pesar de la expansión de las franquicias de comida rápida, millones de franceses son leales a sus queridos baguettes.
La comodidad de los clientes, sin embargo, muchas veces es sacrificada en este país a favor de mantener los ritmos de vida. Muchas tiendas en pueblos pequeños e incluso en las áreas menos transitadas de París cierran al mediodía. En agosto, muchos negocios —incluidas la panaderías— cierran durante gran parte o todo del mes vacacional.
Hecht quiere que su máquina automática de baguettes llene esos vacíos.
Su primer intento hace dos años encontró numerosos problemas técnicos. Ahora, con la ayuda de un ingeniero portugués y avances tecnológicos, Hecht desarrolló una máquina moderna que empezó a operar en Hombourg-Haut en enero.
Vendió unos 1.600 baguettes en su primer mes y casi 4.500 en julio.