viernes, 25 de noviembre de 2011

Fracasa intento de escapar de isla prisión mexicana a lo "Papillón"

CIUDAD DE MÉXICO, 25 noviembre 2011 (BBC).- La marina de México recapturó a seis presos que habían escapado de la colonia penal de las Islas Marías, la última prisión isla que funciona aún en el continente americano.
Los fugitivos fueron interceptados en aguas del Océano Pacífico, cerca de Puerto Vallarta, después de que lograran recorrer unos 100 kilómetros en una balsa improvisada con botellas plásticas de agua y planchas de madera.
En el penal de las Islas Marías los prisioneros no están encerrados, sino que viven en pequeñas casas y cultivan sus parcelas.
Según los medios locales, el mar sirve de barrera natural y de disuasivo para evitar escapes.
La patrulla que capturó a los escapados informó que habían sufrido serías quemaduras de sol y que su estado de ánimo "no era de felicidad".

A lo Papillón

En América Latina las islas prisiones siguieron un modelo impuesto en Europa. Una de las más conocidas en el viejo continente fue la de If, popularizada por el escritor Alejandro Dumas en la novela El Conde de Montecristo escrita en 1844.
El intento de los presos de escapar de las Islas Marías, sin embargo, despertó comparaciones con la experiencia de Henri Charriere, quien estuvo convicto en la "Isla del Diablo" ubicada en la Guayana Francesa, de donde se fugó en 1941, para luego escribir la famosa novela "Papillón" que terminó siendo convertida en una película protagonizada por Dustin Hoffman.
Otras islas prisiones famosas incluyen la de Robben en Sudáfrica, donde estuvo preso Nelson Mandela, y Alcatraz, en la bahía de San Francisco en EE.UU., de donde nadie pudo escapar según cuenta la historia oficial.
La penúltima isla prisión cerrada en América Latina fue la de Coiba en Panamá en 2004, luego de una matanza provocada por enfrentamiento entre internos.
Las Islas Marías, situadas a 112 km de la costa mexicana, comenzaron a funcionar como prisión en 1905 y llegaron a tener hasta cerca de 30.000 presos. En 2004 se inició una reestructuración del sistema poniendo un énfasis en la rehabilitación de los detenidos. En la actualidad sólo alberga a cerca de mil reclusos.