GINEBRA, 29 octubre 2012 (AFP).- Suiza, que no tiene costa marítima, pero sí varios lagos, no puede descartar totalmente tener que volver a vivir otro tsunami como el que ocurrió en el año 563 en el lago Lemán, según un artículo publicado el domingo en la revista Nature Geoscience.
Los tsunamis, que suelen estar asociados a importantes terremotos, son particularmente temidos en las costas marítimas, tras los dramas acaecidos en Indonesia en 2004 y en Japón en 2011.
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Así, en el año 563, una ola gigante devastó la orilla del lago Lemán, el mayor lago natural de Europa Occidental, en lo que se conoce como la catástrofe del Tauredunum.
Dos relatos históricos describen este mortífero tsunami, causado por derrumbes en donde hoy es el cantón suizo de Valais, a más de 70 kilómetros de Ginebra, en el lugar en que el Ródano entra en el lago Lemán.
Este tsunami inundó la orilla del lago, arrasó pueblos, habitantes y animales, destruyó el puente de Ginebra y penetró en la ciudad, dejando muertos.
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Dicho estudio permitió descubrir un depósito gigante de sedimentos bajo el lecho del lago, el cual, según los investigadores, se depositó de una sola vez.
Este depósito tiene más de 10 kilómetros de largo y cinco de ancho, un espesor promedio de cinco metros y un volumen mínimo estimado en 250 millones de metros cúbicos, o sea el contenido de 100.000 piscinas olímpicas. El depósito es más espeso en el sureste, lo cual indica que su origen sería la región donde desemboca el Ródano en el lago.
Los investigadores también analizaron muestras biológicas, que confirman una datación que sitúa la llegada de ese depósito entre los años 381 y 612.
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Simulaciones informáticas mostraron que luego de un desmoronamiento de este tipo, una ola de 13 metros llegó al cabo de 15 minutos más tarde a Lausana y una de ocho metros a Ginebra, 70 minutos después.
Una reconstitución de la ciudad de Ginebra, basándose en la configuración del siglo VI, revela que una ola de ocho metros habría pasado por encima de las murallas de la ciudad, afectando el puente y los molinos, como lo describieran historiadores de aquella época.
Según los investigadores, un acontecimiento así podría reproducirse.
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"Queremos demostrar que las olas de un tsunami pueden afectar potencialmente a ciudades, alrededor de este lago o de otros grandes lagos del mundo", explicó Kremer a la AFP, para quien este riesgo, conocido por los geológos, ha sido "subestimado".
Fotos: Lago Lemán, Suiza (Agencias)