Actrices XXX: La vida después del porno

NUEVA YORK, 23 marzo 2010 (CNBC).- Como cualquier figura del entretenimiento, su trabajo les da "grandes satisfacciones". Durante unos años son objetos de deseo de miles de hombres, pero en cuanto las primeras arrugas aparecen y el cuerpo empieza a traicionarlas, a una edad no demasiado elevada, las estrellas de la industria porno saben que sus carreras en el cine para adultos llegó a su fin, pero ellas desean "seguir con vida".

Las famosas del entretenimiento porno permanecen, normalmente, en el sector. Ya sea por obligación o por deseo propio.

Las grandes estrellas, leyendas de la industria XXX, suelen ser reclutadas por el propio sector para ser embajadoras de esta profesión; otras pasan a ser cazadoras de talento, productoras, escriben sus memorias o se convierten en fotógrafas de este medio e incluso trabajan como maquillistas, ese es el destino más habitual.

Es el caso de Christy Canyon, una reconocida actriz XXX, desde mediados de la década de los 80 hasta 1997 -año en el que se retiró-, tiene una vida económica estable, aún así, trabaja en una productora de "entretenimiento adulto" y dirige el programa Night Calls de Playboy radio.

"No me imaginaba haciendo algo que no estuviera relacionado con el porno", asegura a CNBC.



LAS QUE VAN DE SALIDA

La todavía actriz Jesse Jane sabe que en cuatro o cinco años chicas más jóvenes le quitarán el puesto delante de las cámaras, por eso lleva años trabajando en su propia marca de juguetes eróticos.

Tera Patrick, cuyo reinado en el mundo del entretenimiento para adultos abarcó casi toda la última década, también se ha jubilado recientemente. Ahora, esta belleza se encuentra en una gira de promoción con su libro de memorias. Al mismo tiempo, ella gestiona una discoteca en su intento de explorar nuevos campos.