MICHIGAN, 4 agosto 2010 (AP).- Según informó el diario Rapids Press, Jerry Douthett, un músico de 48 años de edad de la ciudad de Rockford en el estado de Michigan, terminó perdiendo el conocimiento luego de una noche de tragos y al despertar se dio cuenta de que Kiko, su perro, se había comido parte del dedo gordo del pie.
Douthett, tras despertarse observó a su terrier al lado de la cama, su pie y las sábanas ensangrentadas. Su esposa lo llevó de emergencia al hospital, donde “gracias” a las mordeduras de su mascota le pudieron detectar una infección ósea y procedieron a amputar el resto del dedo.
El músico, declaró estar muy agradecido con Kiko ya que desde hace algún tiempo sospechaba que tenía algún problema en el pie pero que se resistía a visitar un médico, pero que luego de ser hospitalizado tras el incidente, se le descubrió un mal diabético cuyo tratamiento puede salvarle la vida.
Foto: Kiko junto a . ()