miércoles, 13 de octubre de 2010

Vecinos de una ciudad peruana destrozan burdeles, hartos de los líos que generan

LIMA, 13 octubre 2010 (AFP).- Vecinos de la ciudad peruana de Huamanga, al sureste del país, cansados de los líos entre prostitutas, parroquianos y delincuentes, destrozaron cuatro burdeles y, cuando se dirigían a hacer lo mismo con otros locales, la policía lo impidió, informó el martes la policía regional.
El incidente se produjo el lunes en la noche entre las avenidas Arenales y Cusco, donde hay varios prostíbulos, la mayoría clandestinos, informó un portavoz de la policía.
"Los vecinos, luego de quemar las camas, los enseres y destrozar las botellas de licor, se dirigían a otros locales para hacer los mismo, pero fueron cerrados por la policía que los calmó", dijo el portavoz, quien aseguró que, cuando un burdel es cerrado por la policía y el municipio, a las 48 horas abren por orden judicial.
"Estamos cansados de tanta delincuencia, nadie puede pasar por esos lugares en la noche porque son asaltados", dijo un vecino a una emisora local.
A finales de septiembre, veinte clientes destrozaron un prostíbulo, ubicado en una calle céntrica de Ayacucho, y quemaron sus enseres en protesta porque eran "mal atendidos" y sometidos a constantes robos. A los parroquianos se unieron algunos vecinos que indicaron estar cansados de escándalos en la zona, donde denuncian que proliferan numerosos burdeles con fachada de discotecas.

Turba de ayacuchanos destrozó cuatro burdeles en protesta por escándalos

LIMA, 13 octubre 2010 (El Comercio).- Pobladores de Huamanga irrumpieron en cuatro burdeles ubicados en el centro de esta ciudad ayacuchana y destrozaron sus instalaciones, hartos de los constantes escándalos entre prostitutas, parroquianos y delincuentes.
La enfurecida turba de vecinos llegó a los locales ubicados entre las avenidas Arenales y Cusco, la noche del lunes último, y de inmediato quemó camas, los enseres y rompió las botellas de licor.
Sin embargo, cuando se disponían a ingresar a un quinto inmueble donde también se ejerce la prostitución, la policía tuvo que realizar un cordón de custodia para que cumplan con su cometido.
“Estamos cansados de tanta delincuencia, nadie puede pasar por esos lugares en la noche porque son asaltados”, dijo un vecino.
Video: Canal N