El fuego sorprendió a seis cajeras de un centro comercial

CULIACÁN, 11 noviembre 2010 (El Universal).- Seis empleadas de la tienda departamental Coppel ubicada en la capital de Sinaloa murieron calcinadas al incendiarse el edificio. La Suprocuraduría de Justicia del Estado dijo que el percance tardó 10 horas en ser controlado y que 15 bomberos resultaron intoxicados.

El siniestro inició al filo de las 21:52 horas del martes, en el primer piso de tres que tiene la sucursal, ubicada en la calle Miguel Hidalgo, a dos calles de la presidencia municipal.

Debido a la intensidad de las llamas, los bomberos de Culiacán fueron apoyados por sus homólogos de Navolato y Guamúchil, ciudades distantes a 40 y a 100 kilómetros, respectivamente.

El fuego fue sofocado hasta la mañana de ayer. Participaron 80 bomberos, además de personal de Protección Civil y de las policías estatal y municipal.

De acuerdo a las primeras investigaciones, el trabajo de los bomberos se dificultó porque los accesos a la tienda estaban cerrados con cortinas metálicas y candados, además de que carecía de salidas de emergencia.

El subprocurador de Justicia del Estado, Martín Robles Armenta, dijo que se investiga el origen del fuego, además de que se pidió a los funcionarios de Coppel un informe completo sobre sus normas de seguridad y si la sucursal contaba con personal de vigilancia.

Según los peritajes, las empleadas realizaban un inventario en el segundo piso y se percataron del fuego cuando el humo comenzó a subir.

El funcionario informó que, de acuerdo a los testimonios de familiares, las mujeres ingresaron a laborar en diferentes horarios; el turno de algunas comenzó a las 7:00 horas.

Blanca Delgado, madre de Claudia Janeth Bernal, una de las víctimas, explicó al periódico El Debate que a su hija y demás empleadas que se quedaban trabajando las dejaban encerradas, cerraban el cancel y lo abrían hasta el día siguiente a las 8:00 de la mañana.

Exigen se haga justicia

La mujer exigió justicia e indemnización justa, “porque nadie de la empresa se ha acercado para apoyarnos con los gastos de los funerales; la empresa nos ha dejado completamente solos”.

“Mi hija (de 25 años) no se merecía morir así”, dijo muy molesta, además deja a dos niños huérfanos.

Las otras mujeres que fallecieron fueron identificadas como: Mariana López Soto, de 24 años; Carmen Selene Moreno Zazueta, de 36; Verónica Picos Bastidas, de 22; Perla Zapata, de 25, y Rosa Imelda Félix Gamboa.

Al filo de las 21:52 horas, en el centro estatal de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C-4), se recibieron dos llamadas de auxilio por el incendio en la Coppel que está en el centro de la capital; al parecer, una fue hecha a través de un celular de una de las mujeres atrapadas en la tienda y la otra por hombres que se encontraban trabajando en la remodelación de las calles del centro.

Al lugar arribaron bomberos de esta capital, que al ver la magnitud del incendio solicitaron apoyo.

Con marros y hachas intentaron romper los candados y perforar las cortinas metálicas que resguardaban los accesos al edificio, pero no lograron conseguirlo, por lo que después de varias horas abrieron boquetes en las paredes, por donde ingresaron para controlar el fuego.

El comandante de Bomberos, Adán Sinagawa, dijo que hasta después de que iniciaron el trabajo se les informó que dentro de la tienda se encontraban haciendo un inventario seis empleadas.

El director de Protección Civil, Francisco Díaz Angulo, hizo referencia a que los bomberos perdieron tiempo, ya que no había salidas de emergencia.

Explicó que en la planta baja había materiales inflamables como llantas, plástico, muebles y material navideño, que fue lo que provocó que el incendio se propagara, además que fue impedimento para que bomberos actuaran con rapidez.

La mañana de ayer en dos ocasiones revivió el incendio, por lo que fue necesario desalojar a comerciantes de la zona, en tanto que peritos en construcción evalúan la estructura del edificio de tres pisos, cuyos techos, comenzaron a desplomarse por el fuego.

Fotografías: El Universal, El Norte y El Sol de Culiacán