BARCELONA, 9 junio 2011 (El Mundo).- Cuando don Juan Carlos bromeó a la salida de la clínica donde fue operado de la rodilla con las 'modernidades' de sus muletas, seguro que no podía imaginar el eco que tendrían sus palabras. "Tienen claxon y todo", bromeó el monarca. Menos de una semana después, están agotadas.
La tienda especializada en ortopedia que las vende en exclusiva en Madrid, Hidelasa, muy cercana al hospital donde fue intervenido don Juan Carlos, ha confirmado a ELMUNDO.es que las muletas 'con claxon y luz' se han agotado.
"Aunque las vendemos desde hace mucho tiempo, ahora con todo este lío, están agotadas. Aunque es posible pedirlas y tardan un tiempo máximo de 15 días en llegar", explica una de las dependientas del establecimiento, proveedor habitual del cirujano que operó al monarca, el doctor Ángel Villamor.
Fuentes del Hospital USP Hospitales, donde el Rey se sometió a una artroplastia de rodilla, también reconocen que éste no es el modelo que habitualmente entregan a sus pacientes; sino que se trató de un obsequio al monarca, "que fue quien las estrenó".
Ergonómicas y cómodas
Más allá de la anécdota del claxon y la luz, la especialista del local subraya que lo más importante de este modelo de muletas es que dispone de "una empuñadura anatómica, bien acolchada, que es muy cómoda para los pacientes que van a estar mucho tiempo con la muleta".
Una idea en la que coinciden otras ortopedias consultadas por ELMUNDO.es. "Lo de la luz y el sonido es una tontería, lo importante es la comodidad y que la empuñadura sea anatómica para evitar que salga callo, aunque hay otros modelos de silicona que reducen este problema". En el caso de una persona de la altura del Rey, sí es posible que se necesite un modelo un poco especial, regulable en altura.
Frente a los 15 euros desde los que se puede adquirir el tradicional modelo metálico de toda la vida en las ortopedias, la 'muleta real' tiene un precio de 59,99 euros cada una (120 euros el par).
En la página web se destaca la ergonomía, confort, estabilidad y estética del modelo, que está diseñada tanto para pacientes diestros como zurdos. Además de ajustarse a la estatura del paciente, la muleta de marras contiene también amortiguadores para evitar el síndrome del túnel carpiano y la subluxación; así como una contera para evitar la bursitis del hombro (esta pieza es la parte de la muleta que 'pisa' el suelo).
Si lo desea, don Juan Carlos también podrá utilizar el apoyo que tiene para descansar la rodilla, encender las luces para caminar por la noche con ellas y accionar el claxon desde un botón accionable si quiere abrirse paso.
De momento, en las próximas semanas no podrá separarse de ellas mientras realiza su rehabilitación en la Clínica Planas de Barcelona.
Fotos: Esquema de las muletas del Rey (20minutos.es) / El rey al salir de la clínica donde fue operado (Agencias)