MÉXICO, 12 enero 2009 (El Universal).- El cerdo como fuente de alimento ha sido estigmatizado por razones médicas, culturales y religiosas. Pero con las modernas técnicas de crianza y las herramientas de la genética, hoy es posible tener animales “esbeltos” con carne tan magra como la del pollo.
Así lo señala Maximino Méndez Mendoza, de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), quien a través del mejoramiento con marcadores genéticos y control ambiental ha elevado el valor nutricional de distintas variedades porcinas.
“El mercado de la región (central del país) nos exige carne suave y magra al 100%”, señala el científico, quien dice que tras la llegada de los aceites vegetales comestibles, la práctica de obtener de 20 a 30 kilogramos de manteca por ejemplar cayó en desuso.
El equipo de Max Méndez efectúa una selección cuya meta es propagar ciertas características que confieren alto valor económico al animal, como conformación corporal, aplomos, estatura, color de pelo, etcétera.
Cuando quieren obtener cerdos libres de grasa, los investigadores universitarios realizan sucesivas cruzas selectivas, apoyados tanto en linajes maternos como paternos. Paralelamente, habilitan los criaderos para proveer a los ejemplares condiciones de máximo confort para facilitar su crecimiento.
Una vez completada la técnica de producción, que se aplica en granjas tecnificadas, los investigadores pueden diseminar los rasgos sobresalientes de sus animales, a través de centros de inseminación, entre los criadores que carecen de recursos para hacer las mejoras.
Más adelante, los expertos de la BUAP pasarán de la genética de poblaciones a la molecular, en la búsqueda de que se expresen genes de interés o que se inhiban los que no son deseables, como el asociado con el estrés porcino. “A mediano plazo le vamos a entrar a esa investigación”, anticipa Max Méndez.
lunes, 12 de enero de 2009
Crían cerdos ligth
5:39:00 p.m.
México