LA HABANA, 12 septiembre 2012 (EFE).- Un campesino cubano ha ideado un método para envasar biogás en bolsas plásticas para facilitar el uso doméstico de ese combustible con la idea de extender su explotación en otras viviendas de la isla como alternativa a las tradicionales bombonas (tanques o balones), informó hoy el diario oficial Granma.
Daniel García (Granma) |
"Aunque hasta ahora se trata solo de una experiencia aislada, el hecho podría trascender como una innovación de gran utilidad", indica el rotativo, al destacar que ese método se ha aplicado con "éxito" en la provincia occidental de Pinar del Río.
Su creador, Daniel García, montó hace seis meses un sistema de biogás en su finca porcina para aprovechar esa energía renovable y también obtener abono orgánico, pero después de unas semanas el volumen del combustible generado superaba la demanda y decidió compartirlo.
García explicó a Granma que para transportar el biogás a otras casas de la comunidad "era necesaria una cantidad de mangueras que habría resultado demasiado costosa" y por eso buscaron "innovar" con otra vía para envasarlo.
Así surgió la idea de almacenar el biogás en bolsas de plástico selladas herméticamente que se utilizan en una fábrica de conservas de pulpa de tomate en la región y que son "muy resistentes y capaces de soportar altas temperaturas".
"Con ellas no hay necesidad de comprimir el gas y, por tanto, el procedimiento resulta mucho más sencillo y eficiente. Simplemente se le conecta la misma manguera que va al fogón y la bolsa se infla como si fuera un globo", detalló García.
Según sus cálculos, cada bolsa puede demorar unos 30 minutos en llenarse y aporta biogás suficiente para que una familia de tres personas elabore sus alimentos durante dos días.
Las bolsas, que según el campesino se pueden reutilizar para el mismo fin, se usan con el mismo principio de las bombonas de gas licuado que emplean muchos hogares cubanos, que se ubican fuera de la cocina y se conectan al fogón mediante un dispositivo para evitar accidentes, añade el diario.
Granma subraya que este sistema resolvería sin grandes inversiones "el viejo dilema de cómo recolectar este importante portador energético" y evitaría los costos de mangueras o tuberías para llevarlo a las cocinas.
Además, remarca el carácter ecológico de la idea al recordar que el biogás es "una energía limpia y segura", y que "un metro cúbico" de ese producto "lanzado a la atmósfera sin combustionar equivale a una tonelada de C02" y "en cambio, su aprovechamiento permitiría cocinar tres comidas para cinco personas".
También para "generar una energía equivalente a 0,5 litros de diesel, 0,6 litros de queroseno o 1,6 KW/h de electricidad", agrega.
"Para ello (...) basta con procesar durante un día las excretas de tres vacas, cuatro caballos, nueve cerdos, diez carneros o 130 pollos", argumenta.
Su creador, Daniel García, montó hace seis meses un sistema de biogás en su finca porcina para aprovechar esa energía renovable y también obtener abono orgánico, pero después de unas semanas el volumen del combustible generado superaba la demanda y decidió compartirlo.
García explicó a Granma que para transportar el biogás a otras casas de la comunidad "era necesaria una cantidad de mangueras que habría resultado demasiado costosa" y por eso buscaron "innovar" con otra vía para envasarlo.
Foto: Agencias |
"Con ellas no hay necesidad de comprimir el gas y, por tanto, el procedimiento resulta mucho más sencillo y eficiente. Simplemente se le conecta la misma manguera que va al fogón y la bolsa se infla como si fuera un globo", detalló García.
Según sus cálculos, cada bolsa puede demorar unos 30 minutos en llenarse y aporta biogás suficiente para que una familia de tres personas elabore sus alimentos durante dos días.
Las bolsas, que según el campesino se pueden reutilizar para el mismo fin, se usan con el mismo principio de las bombonas de gas licuado que emplean muchos hogares cubanos, que se ubican fuera de la cocina y se conectan al fogón mediante un dispositivo para evitar accidentes, añade el diario.
Granma subraya que este sistema resolvería sin grandes inversiones "el viejo dilema de cómo recolectar este importante portador energético" y evitaría los costos de mangueras o tuberías para llevarlo a las cocinas.
Además, remarca el carácter ecológico de la idea al recordar que el biogás es "una energía limpia y segura", y que "un metro cúbico" de ese producto "lanzado a la atmósfera sin combustionar equivale a una tonelada de C02" y "en cambio, su aprovechamiento permitiría cocinar tres comidas para cinco personas".
También para "generar una energía equivalente a 0,5 litros de diesel, 0,6 litros de queroseno o 1,6 KW/h de electricidad", agrega.
"Para ello (...) basta con procesar durante un día las excretas de tres vacas, cuatro caballos, nueve cerdos, diez carneros o 130 pollos", argumenta.