Salvada por una ingestión de Viagra

SANTIAGO, 18 abril 2010 (MSN).- No se conoce su identidad, pero la muerte de este chileno de 40 años destapó toda una vida de abusos hacia su propia hija y, lo que es peor, con el consentimiento de su propia mujer y familia.

No le importaba la corta edad de su hija, que apenas llegaba a los 14 años. Tampoco que fruto de estos abusos y violaciones hubiera nacido una niña, que hoy cuenta con dos años. Nadie intervino para defenderla o protegerla, ni siquiera su madre. Hasta que un medicamento se cruzó en su camino y puso fin a su desgracia: Viagra.

Padre e hija se encontraban en un motel en Villarrica, al sur de Chile, cuando el abusador se tomó dos pastillas de Viagra con la intención de emprender, nuevamente, el acto sexual con la chica. Dos mejor que una, debió de pensar el hombre. Pero el medicamento no tuvo el efecto indicado ya que le provocó un derrame cerebral, falleciendo casi en el acto.