LYON, 7 septiembre 2010 (BBC).- En Francia se ha desatado una polémica aquitectónica con ingredientes religiosos. Un albañil musulmán fue inmortalizado en una gárgola de la catedral medieval de Lyon, en el centro-este del país, pero un grupo político de derecha ha alzado la voz y ha calificado la imagen de una "afrenta" a la Iglesia Católica.
Siguiendo la tradición de la construcción medieval, se decidió agradecerle a Ahmed Benzizine, de 59 años, sus esfuerzos en las obras de restauración del templo usándolo como modelo para una nueva gárgola.
Benzizine ha trabajado durante más de 30 años en la empresa que lleva a cabo los trabajos en la catedral.
Su rostro es ahora totalmente reconocible en una imagen que tiene cuerpo de ave y sobresale desde lo alto de uno de los muros laterales del edificio, explica el corresponsal de la BBC en Francia, Hugh Schofield.
En los pies de la gárgola hay una inscripción en árabe ("Allahu Akbar") y en francés que significa "Dios es grande", una frase islámica popular.
Son exactamente estas palabras las que han desatado la furia de un partido de extrema derecha de la región, Jeunesse Identitaire Lyonnais.
En su sitio de internet, el grupo echa rayos y centellas en un mensaje en el que fustiga la "afrenta de los musulmanes" al ocupar espacios sagrados cristianos.
Pero las autoridades eclesiásticas permanecen imperturbables.
Pierre Durieux, portavoz del arzobispado de Lyon, dijo que la escultura con el rostro de Benzizine es un "símbolo de ecumenismo", es decir, del diálogo interreligioso.
Y agregó que, a lo largo de la historia, las gárgolas siempre han sido figuras profanas que no se encuentran dentro de la iglesia, sino en su exterior.
Fotos: Ahmed Benzizine y la gárgola que lo representa, abajo la gárgola con la inscripción "Dieu est Grand" (Agencias)