LONDRES, 19 julio 2011 (BBC).- Uno de cada tres trabajadores de Reino Unido admite haber mentido para tomar licencia por enfermedad, de acuerdo con una encuesta realizada por la consultora PricewaterhouseCoopers.
PwC encuestó a 1.190 personas, de las cuales el 34% admitió haberse tomado días libres de manera fraudulenta.
La mayoría de ellos dijeron que lo hicieron porque estaban aburridos y deprimidos con el trabajo.
La enfermedad es la excusa más común. Cuatro de cada diez dijeron que planeaban de antemano su ausencia por enfermedad al fingir síntomas en la oficina por adelantado.
Algunas de las excusas más increíbles para faltar al trabajo fueron que se les había escapado el conejo o que tenían amnesia.
Alrededor del 15% de los que se hicieron los enfermos dijeron que trabajaban mucho y que merecían tiempo libre.
"El ausentismo les cuesta a las empresas británicas unos US$50.000 millones al año, pero nuestros resultados sugieren que una gran parte de esta pérdida se puede prevenir", explica Neil Roden, socio de PwC.
Pechos, mascotas y demencia dental
Para el 21% de los trabajadores, la familia era la verdadera razón injustificada de los días de fingida enfermedad.
"Una forma de mejorar esto es crear rutinas de trabajo más flexibles, o mejorar las que ya hay", agrega Roden.
"También es importante que los empleados sientan que los valoramos. Aproximadamente el 15% de los que siempre daban falsas excusas sentían que merecían ese tiempo extra".
Otras excusas poco comunes con las que se toparon los encuestadores fueron operaciones de aumento de pecho, lesiones durante las relaciones sexuales, un dardo en la parte posterior de la cabeza y una persona que dijo que su dentista le había detectado signos de demencia temprana en las encías.
Una mujer de Gales se tomó días libres debido a que "la cal de la ducha se le había caído en un ojo".
Las mascotas también son un manantial de excusas. Un empleado, por ejemplo, dijo que tenía que llevar a su perro al veterinario. Lo que se olvidaba era que ya había utilizado la excusa de que su perro… había muerto.
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