PEKÍN, 16 septiembre 2008 (EFE).- Los organismos sanitarios chinos comenzaron hoy a prepararse ante el previsible aumento bebés con cálculos renales debido a la ingesta de leche adulterada con melamina, que ha afectado ya a mil 253, dos de los cuales murieron.
Según publica la prensa estatal, el ministro de Salud, Ma Xiaowei, instó hoy a todas las agencias médicas a preparar sus equipos debido a que la expansión de los chequeos derivará con seguridad en más casos de bebés afectados.
El Ministerio ha organizado un equipo de 34 especialistas para ayudar al personal sanitario a efectuar el diagnóstico y el tratamiento de los bebés.
"Con tratamiento efectivo, científico y oportuno, haremos todo lo que esté a nuestro alcance para evitar más muertes", afirmó por su parte el viceministro de Salud, Ma Xiaowei, citado por la agencia oficial Xinhua.
Cincuenta y tres de los 340 bebés hospitalizados tras consumir la leche adulterada están en estado muy grave, según datos anteriores ofrecidos por el Ministerio.
La mayoría de las intoxicaciones se produjeron en las provincias de Hebei (norte), Jiangsu (este) y Gansu (noroeste, donde se produjeron las dos muertes).
El nuevo escándalo de seguridad alimenticia en el país asiático, que se destapó la semana pasada, ha sido generado por una leche en polvo para bebés de tres a seis meses de la marca Sanlu, que tiene su sede en Shijiazhuang, capital de la provincia septentrional de Hebei.
La leche estaba adulterada con melamina para engañar a los compradores de la marca, ya que esta sustancia da mayor consistencia a los líquidos, pero al mismo tiempo ha causado graves problemas en el tracto urinario de los bebés y la formación de piedras en el riñón, algo muy extraño en niños de corta edad.
El Gobierno chino ha lanzado una investigación, en la que se han producido cuatro arrestos hasta el momento, dos de ellos anunciados hoy.
Los detenidos son dos hombres 40 años y 43 años que, según la policía, mezclaron melamina con leche fresca que luego vendieron a Sanlu. Estos arrestos se añaden al de dos hermanos propietarios de una central que también adulteraban la leche con la sustancia.
La marca ha retirado 8.210 toneladas de su leche en polvo para bebés del mercado (toda la producida antes del 6 de agosto), y Pekín está en contacto directo con la diplomacia neozelandesa, ya que un 43 por ciento de Sanlu es propiedad de una empresa de Nueva Zelanda, Fonterra Cooperative Group, que se enteró del caso el 2 de agosto.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Helen Clark, aseguró que las autoridades locales cubrieron el escándalo y sólo actuaron enérgicamente contra Sanlu -una prestigiosa marca en el sector lácteo chino- después de que su gobierno contactara con Pekín.
miércoles, 17 de septiembre de 2008
Causará leche adulterada bebés con cálculos renales en China
12:42:00 a.m.
China