LONDRES, 31 mayo 2009 (BBC).- Millvina Dean tenía sólo 9 semanas cuando el Titanic se hundió y hasta este domingo era la única superviviente viva del famoso naufragio. Murió a los 97 años en una residencia para ancianos en Hampshire, en Gran Bretaña.
Dean no recordaba nada de aquel fatal accidente, que el 15 de abril de 1912 le costó la vida a 1.517 personas. Sin embargo, se había convertido en el símbolo de la tragedia por ser la única pasajera que aún estaba viva.
También porque aquel naufragio cambió su vida. Su destino era vivir en Estados Unidos, hacia donde su familia se dirigía cuando embarcó en el colosal Titanic.
Sus padres, que viajaban en tercera clase, querían comenzar una nueva vida y abrir una tabaquería en Kansas. "Si no hubiese sido porque el barco se hundió, yo sería americana", decía a menudo.
La madre de Millvina Dean, Georgetta, y su hermano de dos años, Bert, también sobrevivieron; pero su padre, Bertram, no logró salir del transatlántico.
"Como si yo fuera el Titanic"
"A veces creo que me miran como si yo misma fuera el Titanic", dijo después de visitar una exposición dsobre el naufragio en Estados Unidos. "Sinceramente, creo que algunos son un poco raros con este tema", lamentó.
Sin embargo, nunca se cansó de contar su historia. "He viajado a tantos sitios gracias a esto, he conocido a tanta gente ¡No podría cansarme, no soy de ese tipo de personas!".
Según Paul Clifton, de la BBC, Dean se negó a ver la película de James Cameron sobre el desastre y cuando en 1985 se descubrieron los restos del barco en el fondo del mar, pensó que el interés de los medios por aquella tragedia era "demasiado morboso".
En sus últimos años de vida sufrió para poder sufragar la residencia en la que vivía. Comenzó a contar sus historias sobre el Titanic para recaudar fondos y participó en subastas benéficas en las que contribuyeron Cameron y los protagonistas de la película, Kate Winslet y Leonardo DiCaprio.
"Era una mujer extraordinariamente solidaria y tenía un gran corazón", dijo a la BBC John White, director de la exposición 'White Star Memories' sobre el Titanic.
En el barco había más niños a bordo. Barbara Joyce West tenía 11 meses cuando el barco naufragó y también logró sobrevivir. Murió en octubre de 2007.