TAIPEI, 1 junio 2009 (EFE).- Un veterano de la guerra civil china, de 92 años, y su antigua esposa, de 85, se casaron ayer en Taiwán después de 60 años de separación, informó la oficialista Agencia Central de Noticias (CNA).
Lee Fu-tang, originario de la provincia oriental china de Shandong, se alistó en el Ejército Nacionalista Chino poco después de casarse con Kuan Wen-ying, y la pareja se separó tras la derrota nacionalista en 1949 y el exilio forzoso en la isla de Taiwán.
Tanto Lee como Kuan se volvieron a casar y tuvieron hijos, separados por la Guerra Fría y el Estrecho de Formosa, que hasta la segunda mitad de la década de 1990 fue una barrera infranqueable para los chinos.
Hace dos años, Lee viajó a Shandong y se volvió a reunir con su antigua esposa, que como él ya había perdido a su pareja, por lo que decidieron volver a estar juntos.
Kuan se trasladó a Taiwán y ahora se ha vuelto a casar, para cumplir un sueño de su esposo, que quería un matrimonio más formal que el que celebraron en vísperas de la guerra.
En esa ocasión, la boda consistió en un banquete en un restaurante barato al que sólo asistieron los contrayentes y sus padres.
El sueño de Lee se hizo realidad en Yuanlin, distrito de Changhua, donde reside, gracias a la cooperación de la Fundación para el Bienestar de los Ancianos Honda, que corrió con los gastos de la boda.