WILMINGTON, 2 enero 2011 (EFE).- Es una historia de Navidad. Pero de Navidad consumista. En la localidad de Wilmington, Carolina del Norte (EE.UU.), la nieve significó brillantes y joyas gratis para los cientos de clientes que aceptaron la propuesta de Alan Perry, un joyero que, a principios de diciembre, hizo esta tentadora oferta: si nieva más de 15 centímetros en diciembre, les devolvemos el dinero que hayan gastado.
Según informa CNN, el joyero, como en los cuentos, vendió más de 400.000 dólares en el período comprendido en la apuesta, lo que significó un incremento del 34 por ciento respecto al año anterior, a pesar de la crisis.
Pero nevó. Y cayeron más de 15 centímetros de nieve, por lo que este intrépido comerciante tendrá que devolver los cientos de miles de dólares a sus clientes.
Sin embargo, no está a punto de colgarse porque, el joyero previsor, antes de lanzarse al vacío con la oferta, se gastó 10.000 dólares en un buen seguro que se hará cargo del pago a los clientes quienes empezarán a recibir sus cheques a partir de febrero.
Lo que no se sabe es lo que piensa la aseguradora. Pero Perry está encantado con la promoción, que le ha ayudado a superar la crisis económica con holgura y a mejorar sus beneficios de manera importante, además de a hacerse "famoso", ya que le han llamado de las cadenas de televisión para hacerle entrevistas.
Perry ya está pensando en la promoción del año que viene. Aunque eso sí, quizá cambie de ciudad. Y seguramente tendrá que cambiar de seguro.