ROMA, 22 junio 2010 (EFE).- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, confiesa que su madre, Rosa Bossi, fallecida en febrero de 2008, ya dejó escrito en vida el epitafio que le gustaría ver sobre la tumba de su hijo: "Fue un hombre bueno y justo, dulce y fuerte".
Es el propio mandatario quien da cuenta de este hecho en una entrevista para la revista italiana "Oggi", que se publicará mañana y de la que hoy se adelantan algunos extractos en los que el primer ministro de Italia habla de algunos asuntos de su vida personal.
"¿Sí es verdad que mi madre me escribió el epitafio? Sí, es verdad. Una vez en una cena hablamos de ello bromeando. A la mañana siguiente me trajo una hoja en la que había escrito, ya no de broma, sino seriamente, la frase que le habría gustado que fuera esculpida sobre mi tumba", comenta Berlusconi en la entrevista.
"Puedo decirla: 'Fue un hombre bueno y justo, dulce y fuerte'. 'Gracias, mami', le dije, 'intentaré serlo'", apunta.
En "Oggi", que publica su editorial Mondadori, el primer ministro italiano habla además del divorcio de su segunda esposa, Verónica Lario, cuya separación llegó el año pasado tras el escándalo por el cumpleaños de la joven Noemí Letizia. Berlusconi asegura que este divorcio ha sido "más doloroso" que el de su primera mujer, Carla Dall'Oglio.
"Respecto al de Carla, el divorcio de Verónica ha sido para mí más doloroso. Algunos episodios del asunto me han herido, incluso, pero no quiero volver sobre ello. La cosa más importante es el afecto con que nuestros tres hijos siguen profesando a sus dos padres, confirmando así que han recibido una óptima educación y que tienen un gran equilibrio", comenta Berlusconi.
El primer ministro sólo tiene buenas palabras para su primera esposa, de quien se divorció en 1985 y con quien tuvo a dos hijos: Marina, de 43 años, y Piersilvio, de 42, quienes trabajan para el grupo empresarial de la familia, Fininvest.
Carla Dall'Oglio "ha sido y es una gran madre y una gran señora. Se comporta siempre con admirable discreción. La quiero mucho y ha sido, repito, para mis hijos la mejor madre posible", afirma Berlusconi.
"Nuestros caminos se separaron hace muchos años, pero no ha habido, desde entonces un sólo momento en el que no se haya comportado con una discreción ejemplar, estando siempre cerca de nuestros hijos con gran dedicación y generosidad", agrega.
En la entrevista, el mandatario asegura que los hijos de su segundo matrimonio (Bárbara, Eleonora y Luigi, los tres en la veintena) poco a poco irán entrando a trabajar en su grupo empresarial, punto por el que, según la prensa italiana, habían surgido ciertos roces entre los hermanos de una y otra esposa.
"Estoy convencido de que Bárbara, Eleonora y Luigi podrán entrar y encontrar un puesto activo, de responsabilidad verdadera y de plena satisfacción, como ya ha pasado con Marina y Piersilvio. En esto creo ser un padre justo y ecuánime", incide.