Lago argentino cambia de coloración luego de sismo en Chile

BUENOS AIRES, 4 enero 2011 (EFE).- Un grupo de científicos investiga un cambio de coloración registrado en las aguas del lago Nahuel Huapi, de 550 kilómetros cuadrados de extensión en el sur de Argentina, luego del fuerte sismo que este domingo sacudió al vecino Chile.

Ese terremoto parece ser el motivo de la aparición de una amplia franja de aguas más claras en el Nahuel Huapi, a cuyas orillas se levanta Bariloche, el mayor centro de turismo de invierno de Argentina, indicó hoy el vulcanólogo argentino Gustavo Villarrosa.
Señaló que un fenómeno similar ocurrió en otro lago argentino luego del sismo que arrasó con poblaciones chilenas en febrero pasado y destacó que los estudios de estos hechos son "valiosos" para la vulcanología.
El lecho del Nahuel Huapi tiene sectores "más inestables" por sus pendientes, que a lo largo de distintas épocas acumularon distintos tipos de sedimentos, explicó a la agencia oficial de noticias argentina Télam.
"Hay capas de sedimentos gruesos, finos, de ceniza volcánica, que ante un movimiento del terreno pueden entrar en suspensión y estar así varios días", apuntó Villarrosa, de la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología.
El Nahuel Huapi es uno de los mayores lagos de la Patagonia argentina, al pie de la cordillera de Los Andes, hito fronterizo con Chile.
Villarrosa dijo que después del terremoto de 6,9 grados en la escala de Richter registrado el domingo en territorio chileno, comenzó a notarse en el Nahuel Huapi una franja de aguas más claras que lo habitual que se fue ampliando hasta cubrir más de la mitad de las costas de Bariloche, a 1.600 kilómetros de Buenos Aires.
Señaló que luego del sismo que arrasó con varias poblaciones del sur de Chile en febrero pasado un fenómeno similar se registró en el lago Huechulafquen, situado a unos 400 kilómetros al norte del Nahuel Huapi.
El año pasado, los científicos argentinos hicieron un mapa de alta definición del lecho del Huechulafquen, unos estudios que resultaron "valiosos" para conocer más "sobre procesos del pasado, como sismos o dispersión de cenizas volcánicas, y además hacer pronósticos para el futuro", aseguró.



Estudian llamativo cambio en la coloración del Lago Nahuel Huapi

BARILOCHE, 3 enero 2011 (ANB).- Podría deberse al movimiento de sedimento producto del último terremoto en Chile. Las aguas, entre el centro de la ciudad y Dina Huapi, tomaron un color turquesa. Otros lagos de la región mostraron procesos similares luego del sismo de fines de febrero. Hoy expertos del CONICET y Parques Nacionales sobrevolarán la zona y realizarán estudios del agua. El vulcanólogo Gustavo Villarrosa anticipó ayer a ANB que pudo haberse producido un deslizamiento subacuático. Tampoco descartan el crecimiento de un alga o simples efluentes liberados por las lluvias de los últimos días.

El Lago Nahuel Huapi
presenta desde hace varias horas un notable cambio de color en una franja que va desde el centro de la ciudad, hacia el este, hasta la zona de Dina Huapi, y desde la costa varias decenas de metros hacia la profundidad. El fenómeno llamó la atención de los especialistas de Parques Nacionales y el CONICET, que hoy realizarán un sobrevuelo del área y tomarán muestras de agua para analizarla.
Si bien la primera de las hipótesis estuvo vinculada con la liberación de efluentes de los sistemas de tratamiento de líquidos cloacales debido a las lluvias, la intensidad de las mismas no habrían sido suficientes para cargar el lago de esa forma.
Los técnicos apuntan a una serie de deslizamientos subacuáticos que provoca desmoronamientos y la liberación de partículas finas, que provocan un cambio en el color del agua. Ese movimiento se habría producido por el último sismo de 6,9 grados en la Escala Richter, producido el domingo en Chile.
Gustavo Villarrosa es vulcanólogo y desarrolla su tarea en el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en Bariloche, y en diálogo con ANB especuló que “lo que es probable es que haya habido algún deslizamiento subacuático”, y explicó que en el fondo se encuentran “sedimentos finos, gruesos, cenizas volcánicas antiguas” que podrían haberse movido.
Recordó que luego del terremoto en Chile del pasado 27 de febrero, el lago Huechulafquen tuvo un proceso similar. En aquella oportunidad, a pedido de Parques Nacional, Villarrosa integró un equipo de estudio que realizó una barimetría de alta resolución -una suerte de mapa en tres dimensiones del fondo del lago-, que permitió determinar que se produjeron “importantes deslizamientos” que provocaron el fenómeno. Además se tomaron muestras del fondo para una sedimentología y se estudió el agua y sus componentes.
Ahora, en el Nahuel Huapi se realizaría una trabajo similar, ya que también presenta características similares. “Es igual que en la superficie, una ladera de montaña inestable, y cualquier vibración dispara este fenómeno”, indicó Villarrosa.
El vulcanólogo explicó que el cambio en la coloración del Nahuel Huapi “puede estar asociada al sismo”, aunque apuntó que “no es muy claro aún”, y no descartó otras motivaciones como “el crecimiento de algún tipo de alga”.
Hoy se prevé, si las condiciones del clima lo permiten, que con un helicóptero los técnicos del CONICET y Parques Nacionales realicen un vuelo sobre el lago para determinar “dónde está y cómo se mueve, para ver cómo evoluciona” la franja que modificó su coloración.
Villarrosa realiza estudios sobre fenómenos de este tipo, relacionados con el terremoto y lagomoto de 1960. Hace algunos años, junto a un equipo de técnicos, concretó con el aporte de profesionales suizos, una serie de estudios sísmicos de alta resolución que permitió observar el corte de los sedimentos y su estructura, ver los deslizamientos, la capas de cenizas, entre otros elementos. En estos momentos, en tanto, lleva adelante una investigación sobre las capas y la superficie, con relación a los deslizamientos del pasado.

Fotos: Lago Nahuel Huapi, Argentina (Agencias)